Una gran ola partió en dos la embarcación en la que falleció un hombre y otro resultó herido

Se van conociendo algunas de las circunstancias en las que anteayer se produjo el desgraciado hundimiento de una pequeña lancha frente a la costa de El Rinconín, junto al pedrero a los pies de 'La madre del emigrante'. Según explicó la Guardia Civil, un golpe de mar causado por una gran ola partió en dos la embarcación en la que estaban Jorge Díaz Menéndez, de 55 años y que resultó fallecido, y José Ángel Bango, de 50 y que fue rescatado por miembros del equipo de salvamento del Ayuntamiento de Gijón y trasladado al Hospital de Cabueñes. La Benemérita apuntó que, aunque la mar estaba bien, de pronto cambiaron las condiciones meteorológicas y se comenzaron a generar olas, una de las cuales, de gran tamaño, acabó partiendo en dos la pequeña lancha de madera.

Como es habitual en estos casos, el cuerpo del fallecido fue desembarcado en los pantalanes de Marina Yates, en el espaldón de los muelles de La Osa, donde el juez de guardia procedió al levantamiento del cadáver. De ahí, fue trasladado al Instituto de Medicina Legal, donde se le practicó la autopsia. Es el procedimiento normal y ahora la policía judicial es la encargada de hacer todas las averiguaciones para conocer las causas del fallecimiento.

Una de las cuestiones que se pudieron conocer ayer es que Jorge Díaz no habría fallecido en el acto, ya que, tal y como explicó su amigo Javier Suárez, el otro tripulante de la lancha habría relatado que Díaz le dijo que saliera nadando hacia la costa y que «ya me arreglo yo». Tampoco su hermana, María José, se explica lo que pudo ocurrir, ya que «nadaba muy bien».

La llamada que alertó del accidente al Servicio de Emergencias del Principado de Asturias se produjo a las 19.32 horas y no fue hasta casi una hora después cuando el helicóptero de Bomberos de Asturias localizó «un cuerpo inerte y a flote» que fue rescatado por una moto de agua y la lancha neumática de Bomberos de Gijón.

El operativo de rescate movilizó a Bomberos, Policía Local, Salvamento Marítimo, el equipo de salvamento en playas municipal y Bomberos de Asturias. Fueron dos miembros del equipo de salvamento quienes, a bordo de una de las motos de agua más potentes de que disponen, pudieron llegar al lugar del accidente a tiempo de poner a salvo al herido. Poco después de la actuación llegaron a reconocer que si hubieran utilizado otra moto de menor potencia no habrían podido hacer el rescate, que resultó muy difícil. Desde el propio servicio explicaron que «fue un rescate complicado» y resaltaron «la eficacia de quienes intervinieron en él».

Desde la sociedad estatal Salvamento Marítimo explicaron que su intervención en el operativo fue de apoyo y que el peso de la actuación la llevaron los bomberos gijoneses. Además, la 'Salvamar Rigel' realizó labores para comprobar que la pequeña embarcación hundida no había causado una fuga de combustible. Si bien la mayor parte de los restos de la lancha quedaron sobre la arena de la playa del Cervigón, a la que se accede por la escalera 23, en la mañana de ayer la embarcación Lima Sierra, de Cruz Roja del Mar, trabajó para retirar algunos restos que aún quedaban a flote, especialmente de madera, para evitar que pudieran ocasionar algún incidente.

Las investigaciones continúan y la Guardia Civil aseguró que esperará unos días a que el herido en este accidente se reponga totalmente para hablar con él y conseguir un relato de los hechos más ajustado a lo que ocurrió. Entre tanto, a la una de esta tarde, en el tanatorio de Cabueñes, tendrá lugar el acto de despedida de cuerpo presente en memoria de Jorge Díaz.

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