«La ITV provocaría atascos continuos en nuestras estrechas carreteras»

-¿En qué les afectaría la instalación de una estación de la ITV?

-En absolutamente todo. Supondría un cambio sustancial en la forma de vida que tenemos en la parroquia. Nada volvería a ser lo mismo y todo sería mucho peor.

-En qué sentido.

-Tenemos estructuras acordes a lo que somos: una zona rural. Granda presenta caleyas y carreteras secundarias que se reservan a una escasa circulación. Naturalmente, la instalación de una ITV provocaría atascos continuos en nuestras estrechas carreteras.

-Eso tendría consecuencias en el día a día.

-Por supuesto. Estaríamos condenados a un atasco cada vez que saliésemos de casa. Cada vez que nos desplazásemos al trabajo, a la compra o, en el peor de los casos, que tuviésemos que acudir al médico por una urgencia. Tendríamos que hacer frente a una carretera colapsada por el exceso de coches. Ante semejante escenario, no nos queda otro remedio que oponernos.

-Esto se lo habrán transmitido al Principado. ¿Cuál es la respuesta?

-Ninguna. No existe contacto alguno. Lo hemos intentado en diversas ocasiones por varios cauces, pero no hemos obtenido respuesta alguna. Agradeceríamos el gesto, pero dudo de que un diálogo solucione nada.

-¿Por qué este pesimismo?

-No se trata de un planteamiento pesimista. Somos realistas. En otras cuestiones se pueden alcanzar acuerdos, pero en esto no. Nosotros nos oponemos tajantemente a la ITV y ellos son partidarios de implantarla. No hay margen de acuerdo. Aquí no puede haber medias tintas. O triunfa su postura o lo hace la nuestra.

-Entonces, ¿se han rendido?

-Claro que no. Nuestro objetivo se limita a convencerles de que están equivocados. No nos daremos por vencidos. Mantendremos la presión vecinal hasta que cesen en su empeño. En esta zona no se dan las condiciones para tener una ITV.

-¿Y dónde creen que debería ubicarse?

-A esa pregunta no puedo responder. La decisión tendrá que quedar supeditada a unos informes técnicos que la argumenten. Normalmente, se ubican en polígonos industriales en torno a autovías o carreteras principales. El caso que nos ocupa supone una clara anomalía.

-Pero en este caso también habrá unos informes técnicos como los que mencionaba.

-Tendrán que explicar los motivos que les han impulsado a tomar esta decisión que atenta contra el sentido común y contra la lógica. Supongo que habrá un argumentario detrás, pero estoy convencida de que no servirá para que cambie nuestra posición.

-Habrá quien no entienda una postura tan taxativa.

-Seguramente, pero nuestro objetivo no se reduce agradar a los demás. Tenemos que pelear por defender los intereses de la parroquia. Representamos a un movimiento vecinal espontáneo, pero que tiene muy claras sus ideas. No hay que confundir la rigidez con la firmeza. Siempre hemos demostrado adaptabilidad frente a las situaciones adversas.

-Ponga un ejemplo.

-Jamás nos opusimos a la sala de despiece del matadero, un proyecto que después quedó en nada. Además, el propio matadero produce olores que no resultan agradables para los vecinos. Son problemáticas que nos afectan pero que asumimos con naturalidad. La diferencia radica en que nos plantean un escenario que no tiene ningún tipo de sentido.

-¿Es optimista?

-De nosotros solo depende una cuestión: que si nos instalan la ITV, nadie pueda decir que no hemos luchado todo lo posible para evitarlo. Y en ello concentramos los esfuerzos. No nos dedicamos a pronosticar.