«La mediación es la justicia sin jueces que mejora las relaciones humanas»

Existe una posibilidad de resolver todo tipo de conflictos sin necesidad de pasar por un juzgado y, aún más importante, pudiendo resolver las controversias las propias partes en conflicto. Se trata de la mediación, «un método alternativo que no solo ayuda de manera rápida, eficaz y barata, sino que además mejora las relaciones humanas entre las partes que se someten» a este proceso. Así lo define el mediador, abogado y director general de la Asociación Española de Mediación (Asemed), Jesús Lorenzo Aguilar, que hoy impartirá una conferencia en el Ateneo Jovellanos bajo el título 'La mediación: un instrumento de nueva justicia al servicio de una ciudadanía exigente' a las 19.30 horas.

La dinámica de este procedimiento, cuenta, es sencilla: «Una persona puede solicitar la mediación o ambas partes, de mutuo acuerdo a una institución de mediación o a un mediador profesional. Posteriormente, el mediador designado, se encargará de gestionar el conflicto entre las partes, aunque son ellas las que deben realizar las propuestas que crean convenientes hasta llegar a un acuerdo. Además, si lo estiman conveniente, pueden estar asesorados por sus abogados en el procedimiento de mediación». Ya por último, «Por iniciativa del mediador, de acuerdo con los participantes, se señala la fecha o fechas en la/s que se desarrollará la sesión de mediación, hasta alcanzar un acuerdo de resolución si las partes lo estiman conveniente». Lo que tarda un proceso judicial en resolverse, es decir, normalmente más de un año de media, «la mediación lo hace en un mes». El acuerdo en la mediación «equivale a una sentencia judicial siendo ejecutable ante los propios juzgados», puntualiza Aguilar.

Y no solo eso, también destaca el ahorro que se consigue entre un método y otro, «de unos 4.500 euros por parte si hay juicio a 300 euros, por parte también, de hacerlo a través de la mediación». Aguilar considera que «se está produciendo un cambio de paradigma» en la forma de ver la Justicia, pues, sostiene, «nuestra cultura desde siempre se ha basado en un principio autoritario donde las instituciones no confiaban en los ciudadanos». Sin embargo, cree Jesús Lorenzo Aguilar, «cada vez más los ciudadanos cobran protagonismo gracias a métodos como la mediación». Este sistema hace, además, «que las personas sean más valientes para afrontar sus propios conflictos».

«Nos da miedo hablar a solas con la persona con la que tenemos el problema. No hablamos por recelo del contrario y nos pueden los sentimientos negativos. Por tanto esta fórmula ayuda a superar esos obstáculos», señala.