Un mural de récord sobre el reciclaje
Tres grafiteros decoran los 800 metros cuadrados de la nave de Desguaces Daniel González Riestra en San Andrés de los Tacones. «Estamos muy orgullosos»
Cuando a la empresa de grafiti asturiana Dolky le llegó la petición por parte de Desguaces Daniel González Riestra de realizar un mural de ... 800 metros cuadrados para su nueva nave de hormigón, situada en el polígono que tiene el grupo en San Andrés de los Tacones –lugar que sufrió un grave incendio el 4 de enero de 2018– no estuvieron muy seguros de aceptar porque nunca se habían enfrentado a «tales dimensiones». Pero, finalmente, decidieron embarcarse en la aventura.
Tras dos intensos meses de trabajos, José Vega (Dask); Alberto García (13iglesias) y Raúl Gil (Niño) –los artistas que se encuentran tras la empresa– pueden decir orgullosos que el suyo es «el mural más grande de Asturias y uno de los mayores de España».
La nueva nave, que es una «especie de marquesina gigante», explica Vega, está abierta por una de sus caras, que es donde se guardan los residuos. En las otras tres es donde los artistas han intervenido. En ellas, el mural marca dos zonas divididas, una con un fondo anaranjado y otra en la que predomina el azul. «Queríamos que se viera una transición de lo que hace la empresa».
«Queríamos que se viera una transición de lo que hace la empresa y que ayuda a crear una atmósfera limpia»
Ese desarrollo comienza con el símbolo del reciclaje y la imagen del desguace, mostrando así ese primer paso cuando los residuos llegan al polígono. Luego la imagen central muestra una máquina que se encarga de triturar el metal, así como el proceso de fundición que, si bien no lo realiza el grupo, es el objetivo que se persigue. Por eso, a su lado hay un camión del grupo que representa cómo se transportan los componentes a otras empresas que reconvierte los materiales. El vehículo está acompañado de un fondo con un río azul, montañas y mucho verde, una imagen que representa la naturaleza en estado puro. «Este reciclaje que realiza el grupo ayuda a crear una atmósfera limpia», explica Vega.
Desde Montiana
A los artistas les enorgullecehaber «afrontado algo tan grande» y agradecen que «un cliente haya apostado por un trabajo que solo le aporta un valor estético». Aunque Vega lamenta que «no pueda verse desde la carretera de acceso» porque se encuentra en la cara abierta, pero desde la de Montiana sí puede apreciarse esta gran obra de arte. A pesar de la alegría que le transmite a Vega que cada vez más clientes privados confíen en este tipo de murales para sus proyectos, le gustaría que hubiera «una mayor apuesta» de desde las entidades públicas.
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