Obras en la plaza de toros
Se esperaba que la rehabilitación del coso de El Bibio estuviera concluida en julio, pero no se llegaría a tiempo para San Antonio
Iba a ser más difícil de lo que había parecido en un primer momento. Las obras de rehabilitación acometidas hace cinco lustros por el Ayuntamiento ... para poner a punto la plaza de toros de El Bibio llevarían su tiempo, no pudiendo llegar a tiempo «para recuperar la tradición de la corrida de San Antonio», el 13 de junio. «Se trata de un edificio con 110 años de historia», contamos hace 25, «una guerra de por medio y mucho deterioro acumulado. Por eso, a lo largo de las obras se han encontrado vicios ocultos a los que ha habido que hacer frente. La plaza presenta ahora un aspecto caótico, pero en algunas partes ya empiezan a notarse los beneficios de una gran obra de rehabilitación».
Ya se habían llevado a cabo, por ejemplo, las obras en la madera en los palcos y andanadas, y se estaban colocando, a la sazón, «distintas redes de acometidas, además de la reparación de los toriles, los diferentes patios y el resto del edificio». También se limpiarían las gradas de piedra y se colocaría un sistema de seguridad contra los incendios, algo que el edificio no había tenido en su ya abultada historia en Gijón.
Se preveía también rehabilitar el entorno exterior de la plaza, lo que se llevaría a cabo entre febrero y mayo de 1998. «Esta superficie de casi 10.000 metros cuadrados se va a convertir en un parque público. Con pavimentos de ladrillo, mobiliario urbano y árboles, la ciudad contará desde esta primavera con un nuevo parque». El 23 de enero, la visita oficial del alcalde, Álvarez Areces, y del concejal de Festejos, Gutiérrez Granda, sirvió como espoleta para presentar la fase final de los trabajos, y también para elogiar lo que hasta la fecha se llevaba hecho. Aunque con puntualización: Areces «recordó a la empresa la necesidad de cumplir con puntualidad los plazos marcados, y señaló que 'la rehabilitación de la plaza de toros es un esfuerzo de recuperación del patrimonio de la ciudad y de dar a Gijón un nuevo espacio de ocio y de actuaciones musicales'». Precisamente un concierto era lo que se preveía para inaugurar el nuevo coso, aunque los próceres «no quisieron adelantar de quién». Una sorpresa más.
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