Piso palaciego con capilla y vistas al Puerto Deportivo

La exclusiva vivienda es propiedad de la familia Varela Monasterio y tiene una superficie de 550 metros cuadrados. Del interior destacan sus amplios salones, la enorme chimenea, la biblioteca, la sala de música y sus altos techos ricamente decorados. Y del exterior, sus espectaculares vistas a la dársena deportiva. Cuenta con cinco amplios dormitorios y otros tantos baños.

Tan singular piso estuvo ocupado única y exclusivamente por sus promotores, el matrimonio formado por José Varela Hevia y Pilar Díaz Monasterio-Guren con sus dos hijos (fallecidos prematuramente con 23 y 45 años respectivamente). Varela Hevia, un ingeniero industrial educado en Alemania, fue propietario del mayor almacén de maquinaria de la ciudad, situado en Marqués de San Esteban.

Bajo su espectacular vivienda, situada en la misma calle que el almacén, hizo construir en 1944 en el sótano un 'refugio antiaéreo' con capacidad para 48 personsa conforme a la normativa del momento.

La última persona en residir en la vivienda fue su viuda, quien falleció en 2008 con 106 años. El abuelo, la tía, el padre y la abuela (en ese orden cronológico) del actual propietario tuvieron su velatorio en la capilla de la casa. Una capilla con bóveda y vidrieras de gran valor donde se celebraban misas y donde se encuentra actualmente una reliquia vaticana y un casquete papal de Pío XII.

La familia Varela (tercera generación) ha encomendado la venta de la casa a la inmobiliaria Remax Elite, franquicia con presencia en 192 países. La agente encargada de gestionar la venta del inmueble es la exedil de Urbanismo Lucía García Serrano. Según explica la también arquitecta, la vivienda ya ha captado el interés de inversores tanto mexicanos como rusos. Es más, en este momento cuenta con proyectos en estudio para destinarlo a residencia de lujo de la tercera edad y para hotel boutique con siete suites. Por su tamaño, ubicación y valor también podría ser la perfecta sede para un consulado o mantener su uso de vivienda exclusiva.

Además de la propia venta, se valoran ofertas que contemplen la rehabilitación para destinarlo a equipamiento residencial o de otro tipo con una gestión compartida entre propietario y el promotor de la reforma.