El 30% de las plazas públicas de las escuelas infantiles queda sin cubrir por falta de niños

Estos datos son el reflejo de lo sucedido en 2019, cuando nacieron doscientos niños menos que en el año anterior. Según datos del Sadei, 1.315 en 2019 frente los 1.516 en 2018. «No sé qué vamos a hacer. Como esto siga así, nos vamos a tener que dedicar a otra cosa», reconocían en varios centros públicos. Y también en la red concertada, donde la caída en la matriculación ha hecho igualmente mella. Quedaron vacías el 23% de las plazas. 418 peticiones para 615 sillas. El Virgen Reina mejora sus datos y llena sus 25 puestos y el Patronato San José logró una petición más que plazas (26 sobre 25), pero el resto no. Destaca el caso del San Vicente de Paúl, que perdió alumnos, además de por la bajada de la natalidad, entienden en el centro, por el derrumbe sufrido en el edificio en enero. 18 preinscripciones para 50 plazas. En el Codema se quedan en 72 para 100 puestos.

El Severo Ochoa es de los pocos colegios públicos que ha recibido más solicitudes que plazas ofertaba. «Un año más tendremos que baremar», afirmaban al filo de las dos de la tarde, tras constatar un excedente de catorce alumnos, aunque dan por hecho que diez de ellos podrán entrar al no ocuparse las plazas reservadas a alumnado con necesidades educativas especiales. También el Clarín ha tenido más demanda que oferta. «Estamos a tope», celebraba el equipo directivo.

El Laviada no recibió solicitudes suficientes para llenar sus tres unidades. Las 40 recogidas solo permiten completar dos grupos de tres años. «Es la primera vez que bajamos de cincuenta solicitudes. Estamos preocupados y disgustados. La bajada de la natalidad se nota más en barrios como este, con una población muy envejecida», comentaba la directora, Ana Romero. No muy lejos de ese centro, en el colegio Asturias, la reflexión era similar: «Hay muchos coles y pocos nenos». En general, y a la vista del número de solicitudes recogidas, no eran pocos los docentes que no ocultaban su temor ante lo que les puede deparar el futuro.

Mientras, en el Pumarín celebraban sus datos, con 26 preinscripciones para 46 plazas. «Salvamos las dos aulas, algo que el año pasado no logramos», destacaron en este colegio. En el Río Piles hubo 27 peticiones para 23 plazas y en el Martínez Torner 41 peticiones para 46 plazas.

En las escuelas infantiles (educación de 3 a 6 años), en la de Alejandro Casona comprobar que habían recibido prácticamente el mismo número de solicitudes (45) que de plazas en las dos clases para niños de tres años (46) fue «una sorpresa muy positiva porque esperábamos que nos afectara más el descenso de natalidad». En la de Miguel Hernández, las 26 solicitudes les permiten mantener abiertas las dos líneas de primero de Infantil, algo que no ocurre en el caso de la EEII José Zorrilla, que el próximo curso solo tendrá una clase de tres años. En el otro extremo, las escuelas Gloria Fuertes y Las Mestas dispondrán de tres unidades en esa etapa al recibir 48 y 50 solicitudes, respectivamente, para sus 69 plazas.