Los vehículos de más de 20 años podrán circular por Gijón sin rebasar los 2.500 kilómetros al año

Los tres protagonistas del acuerdo comparecieron ayer conjuntamente para explicar en qué consiste este cambio en la normativa que se llevará al Pleno del mes de marzo para su aprobación definitiva. Se revoca la prohibición de circular por el casco urbano a vehículos sin distintivo ambiental a partir de 2026, con «una flexibilización de criterios y de restricciones que afecta a todos los coches que no pueden acceder a etiqueta -a partir de 25 años coches de gasolina y de 20 coches de gasóleo», según explicó el concejal de Movilidad y Medio Ambiente, Aurelio Martín.

Para avalar el número máximo de kilómetros que se pueden hacer al año, los 2.500 que se establecen como tope, los conductores de estos vehículos deberán hacer una solicitud rogada al Consistorio acompañada de un certificado de la ITV anualmente. Martín avanzó, no obstante, que los propietarios de estos vehículos (desde un diésel de 2003 a un Seat 600) no podrán aparcar en superficie, pero sí hacerlo en un garaje o en un parking de pago en el casco urbano.

Además, en paralelo, el Ayuntamiento va a poner en marcha una línea de ayudas, que este año ascenderá a 100.000 euros, para que los conductores con vehículos sin distintivo (contaminantes) puedan comprar coches de segunda mano con etiqueta ambiental (menos contaminantes). Esta especie de 'plan renove' municipal forma parte del acuerdo del equipo de gobierno con Podemos-Equo para aprobar la ordenanza, que ahora se ensancha también con Ciudadanos.

Iván García, portavoz de la plataforma de afectados por la ordenanza de movilidad, destacó que el acuerdo «salva la parte emotiva, económica y social» para preservar coches clásicos y antiguos, al tiempo que se sigue limitando la circulación a los vehículos más contaminantes. Además, a su juicio, refuerza la seguridad de los usuarios de la vía ya que al exigir la presentación del documento de la ITV se pondrá límite al número de vehículos que circulan sin ITV o seguro. José Carlos Fernández Sarasola, de Cs, destacó el papel de «catalizador» de su grupo para sellar el acuerdo.