Los yacimientos gijoneses se cuelan en un belén monumental

Aunque la villa de Veranes y la torre de Cimavilla se construyeron 300 años después del nacimiento del niño Jesús, esto no impidió que la asociación Belenista de Gijón optara por estos dos escenarios para representar el misterio y la cabalgata de Reyes Magos en el 'Gijón Romano' que, desde ayer puede verse en el palacio de San Andrés de Cornellana.

La amplia documentación con la que cuenta la Red de Museos Arqueológicos de Gijón permitió a la entidad recrear al milímetro cada construcción. Por eso, cada elemento en miniatura sigue el modelo de aquel entonces, donde se puede apreciar los tejados hechos de tégula o imbrex. «Ha sido laborioso porque se ha hecho teja a teja imitando la técnica», explicó Julio Gómez que ideó el belén.

A la escena de la natividad que se sitúa en la galería porticada de Veranes y que fue creada en 2020, sumaron este año la Cabalgata. A esta incluyeron distintos soldados romanos tanto en la torre como en las inmediaciones. Todos ellos fueron hechos con una impresora 3D. «No estamos acostumbrados a tener romanos», rió Gómez. El motivo detrás de este decorado es que «la gente ama lo suyo», afirma su presidenta, Plácida Novoa.

Ayer la entidad presentó el belén que quedó inaugurado tras la bendición del consiliario Constantino Bada. Al acto acudió Montserrat López Moro, concejala de Cultura. «Es una forma de que la gente conozca nuestro gran patrimonio», señaló. El lugar elegido para la colocación de este belén monumental sigue la idea de «descentralizar» y llevar una oferta cultural a todos los distritos de Gijón.