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Las protestas contra el racismo en EE UU llegan a la Casa Blanca

Lunes, 1 de junio 2020, 11:54

La muerte de un hombre negro desarmado, George Floyd, a manos de la policía en Minneapolis, encendió la última ola de indignación en Estados Unidos por el uso repetido de la fuerza letal contra los afroamericanos. Después de cinco noches consecutivas de manifestaciones contra el racismo y la brutalidad policial, las protestas se aproximaron a la Casa Blanca, residencia del presidente de EE UU, Donald Trump.

AFP / Reuters / EFE
La muerte de un hombre negro desarmado, George Floyd, a manos de la policía en Minneapolis, encendió la última ola de indignación en Estados Unidos por el uso repetido de la fuerza letal contra los afroamericanos. Después de cinco noches consecutivas de manifestaciones contra el racismo y la brutalidad policial, las protestas se aproximaron a la Casa Blanca, residencia del presidente de EE UU, Donald Trump.
La muerte de un hombre negro desarmado, George Floyd, a manos de la policía en Minneapolis, encendió la última ola de indignación en Estados Unidos por el uso repetido de la fuerza letal contra los afroamericanos. Después de cinco noches consecutivas de manifestaciones contra el racismo y la brutalidad policial, las protestas se aproximaron a la Casa Blanca, residencia del presidente de EE UU, Donald Trump.

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AFP / Reuters / EFE
La muerte de un hombre negro desarmado, George Floyd, a manos de la policía en Minneapolis, encendió la última ola de indignación en Estados Unidos por el uso repetido de la fuerza letal contra los afroamericanos. Después de cinco noches consecutivas de manifestaciones contra el racismo y la brutalidad policial, las protestas se aproximaron a la Casa Blanca, residencia del presidente de EE UU, Donald Trump.
La muerte de un hombre negro desarmado, George Floyd, a manos de la policía en Minneapolis, encendió la última ola de indignación en Estados Unidos por el uso repetido de la fuerza letal contra los afroamericanos. Después de cinco noches consecutivas de manifestaciones contra el racismo y la brutalidad policial, las protestas se aproximaron a la Casa Blanca, residencia del presidente de EE UU, Donald Trump.

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La muerte de un hombre negro desarmado, George Floyd, a manos de la policía en Minneapolis, encendió la última ola de indignación en Estados Unidos por el uso repetido de la fuerza letal contra los afroamericanos. Después de cinco noches consecutivas de manifestaciones contra el racismo y la brutalidad policial, las protestas se aproximaron a la Casa Blanca, residencia del presidente de EE UU, Donald Trump.
La muerte de un hombre negro desarmado, George Floyd, a manos de la policía en Minneapolis, encendió la última ola de indignación en Estados Unidos por el uso repetido de la fuerza letal contra los afroamericanos. Después de cinco noches consecutivas de manifestaciones contra el racismo y la brutalidad policial, las protestas se aproximaron a la Casa Blanca, residencia del presidente de EE UU, Donald Trump.

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La muerte de un hombre negro desarmado, George Floyd, a manos de la policía en Minneapolis, encendió la última ola de indignación en Estados Unidos por el uso repetido de la fuerza letal contra los afroamericanos. Después de cinco noches consecutivas de manifestaciones contra el racismo y la brutalidad policial, las protestas se aproximaron a la Casa Blanca, residencia del presidente de EE UU, Donald Trump.

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