Audi S5 TDI; un coche deportivo y diesel
Aunque los coches diésel no gozan de buena fama social, lo cierto es que siguen siendo los más recomendables para quienes cubren largas distancias
Rubén Fidalgo
Jueves, 6 de mayo 2021, 08:28
Uno de esos coches pensados para hacernos discrutar cientos de kilómetros a sus mandos es el Audi S5, elegante, con buenas prestaciones y con unos consumos ajustados. Si a las atractivas líneas del Audi A5 le añadimos una mecánica que roza los 350 CV y llega a los 700 Nm de par, lo que tenemos es una máquina para devorar kilómetros. Si, además, le añadimos unos consumos muy ajustados, el resultado se llama Audi S5 TDi.
Disponible con carrocería de 3 o 5 puertas, el Audi S5 TDi pone contra las cuerdas en cuanto a prestaciones y sensaciones en la conducción a su homónimo con el motor de gasolina, pero con una enorme diferencia en los consumos, a favor del TDi.
No sólo su consumo es una ventaja, también la etiqueta Eco del Audi S5 TDi es otro de los argumentos a favor de esta berlina o coupé (está disponible con ambas siluetas). Gracias a su sistema mild hybrid de 48 voltios, el Audi S5 TDi no sólo ahorra combustible, también añade otras ventajas adminsitrativas.
Audi S5 TDi: prestaciones con etiqueta Eco
Gracias al empuje de sus 700 Nm de par, el V6 turbodiésel que anima este deportivo ofrece unas prestaciones de primer nivel, como dejan claro cifras como los 4,8 segundos que tarda en alcanzar los 100 km/h desde parado o su velocidad máxima limitada electrónicamente a 250 km/h.
Lo mejor de todo es que estas marcas se logran sin tragar litros a mansalva. El Audi S5 TDi homologa un consumo urbano de 7,2 l/100 km y de sólo 5,6 l/100 km en carretera. Esto supone un ahorro de casi un 30% en consumo frente a la versión S5 de gasolina, sin que las prestaciones sean peores.
El truco para conseguir estos datos está en la eficiencia de su motor V6 de 3 litros sobrealimentado y con sistema de micro hibridación de 48 voltios, gracias al cual logra todas las ventajas de la etiqueta Eco.
Este sistema mejora la eficiencia del stop & start, con unos arranques más rápidos y la posibilidad de apagar el motor diésel cuando circulamos con incercia (en modo «a vela») en rueda libre. Además, la energía acumulada en las fases de retención en la batería de ión de litio de 48 voltios se emplea para asistir al motor diésel en las fases de aceleración, lo que reduce los esfuerzos mecánicos y los consumos.