Bocanada de optimismo
La entrada en servicio de la regasificadora y el millonario contrato para la fábrica de Trubia constituyen dos hechos muy positivos
Casi once años después de haber terminado su construcción, la regasificadora de El Musel ha recibido al primer buque metanero, 'Cool Racer', para realizar una ... descarga de gas natural licuado (GNL). La crisis de suministro del gas ruso, originada por la guerra de Ucrania, puso en valor la planta asturiana, que puede llegar a aportar 8.000 millones de metros cúbicos de gas natural licuado para el consumo europeo. Está mejor ubicada que las regasificadoras de las regiones mediterráneas para recibir gas de Estados Unidos, principal proveedor desde el inicio de la crisis, y muy bien localizada para potenciar el transporte por barco hasta la ciudad de Wilhelmshaven (Alemania), donde a finales de 2022 empezó a operar la primera unidad flotante de almacenamiento y regasificación de Alemania (regasificadora montada sobre una estructura marina que dispone de sistemas de almacenaje).
La regasificadora de El Musel estará conectada a la red de suministro nacional para el gas sobrante derivado de la operación de evaporación. Esta es la diferencia de la infraestructura asturiana con respecto a otras semejantes, propiedad de Enagás (Barcelona, Bilbao, Sagunto, Cartagena, Huelva). El pasado mes de febrero, cuando la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMV) autorizó la entrada en servicio de la planta, concretó cuatro usos: ofertar servicio logístico para cubrir la demanda de GNL, inyectar en la red de transporte el gas acumulado durante la evaporación, dar servicio de cargas en cisternas para hacer frente al exceso de demanda de otras plantas y el servicio de almacenamiento que entrará en el régimen regulado. La planta tiene unas funciones acotadas y un sistema retributivo distinto que durará hasta el año 2026. Recibirá 25,3 millones de euros el primer año, 24,2 millones el segundo y 22,9 el tercero. Sensiblemente por debajo de lo que pedía Enagás. A partir de 2026 se estudiará qué modelo retributivo es más beneficioso «para la seguridad del suministro». Fruto de su particular estatus, mientras el resto de plantas forman la red de suministro nacional, la regasificadora asturiana se orientará a ser el principal centro logístico para abastecer de GNL al Mar del Norte.
El plan del Gobierno de convertir a España en el principal 'hub' europeo del hidrógeno verde tiene como centro Gijón. Enagás prepara inversiones de más de 3.500 millones para construir dos hidroductos, uno que nace en Cartagena, discurre por la costa mediterránea, valle del Ebro y cornisa cantábrica para acabar en Gijón, y otro que va de Puertollano a Gijón. El plan es poder suministrar dos millones de toneladas de hidrógeno al mercado europeo en 2030. En consonancia con este proyecto, se espera adaptar la regasificadora al uso de gases renovables, lo que abrirá una prometedora línea de trabajo para la planta gijonesa. Para desarrollar el servicio logístico, la regasificadora de El Musel tiene alguna cualidad que no todas las plantas similares ofrecen, como la capacidad de trabajar con los buques metaneros con más capacidad del mundo (266.000 metros cúbicos). Tras un largo recorrido tormentoso, que va desde la negativa del Gobierno hace veinte años a incluirla en el Plan Energético Nacional, pasando por las sentencias contrarias a otorgar la licencia de construcción y el plan de hibernación que la dejó aparcada como un recurso energético inútil, la llegada del primer metanero abre la puerta a un futuro prometedor a la regasificadora de El Musel. Con ella deja de ser Asturias la única región peninsular de costa, junto con Cantabria, que no tenía una regasificadora en su territorio.
A la entrada en servicio de la regasificadora se ha sumado otra noticia industrial magnífica, al anunciar la ministra Margarita Robles que la Fábrica de Armas de Trubia va a construir el nuevo Vehículo de Apoyo de Cadenas (VAC). Un blindado que se suma a los vehículos 8x8 Dragados y Castor que se fabrican en Trubia. En conjunto, 8.000 millones de inversión que garantizan carga de trabajo hasta el año 2037. Excelente.
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