Esto es lo que hay

El Sporting lleva una mala semana. No supo certificar un triunfo que tenía muy a mano en Las Palmas y fue incapaz de ganar a un flojo Albacete en un campo impracticable. Esta vez el cansancio afectó a todos.

Tras los dos últimos resultados quizá sea aconsejable pensar en la frase del saguntino y asumir que 'esto es lo que hay'. El Sporting tiene una plantilla corta, afectada por ausencias. La principal es la lesión de Pedro, a quien, probablemente, en Cornellá se le volverá a echar de menos, lo mismo que a Cumic, fichado para dar al ataque una rapidez que se aprovechó muy poco. También se echa de menos a Nacho y Cristian Salvador como alternativas.

A ello se suman los chocantes experimentos de David Gallego, con cambios de sistema y el uso de jugadores fuera de sitio. En la posición de pivote, Manu no es tan resolutivo como en la media punta y carga de trabajo a Gragera. Luego, escorado a la banda, se evapora. La posición del 'jugón' es una guerra perdida con el míster. Cuando desde un banquillo se dan bandazos significa que el timón no tiene un rumbo firme.

La realidad es que el Sporting tiene un equipo renovado, con la inclusión de jugadores de poco recorrido hasta ahora, que precisan pulirse. Ahí están los ilusionantes Guille, Gragera, Gaspar y hasta Pedro, que ahora es poco menos que imprescindible, más Pelayo y Pablo García, que cuentan menos. Luego está otro grupo más experto, que debería marcar la diferencia. De Manu se esperaba mucho más desde que llegó, Álvaro se inhibe y Aitor va a su bola. Este año, Javi Fuego mejoró algo, mientras que Carmona está en un plano alejado y Valiente, en el olvido. En consonancia con sus fichas deberían ser unos pilares básicos.

Menos mal que hay otros jugadores con un tono notable, como Mariño, Babin, Djuka y, por lo general esta temporada, el recuperado para la causa Borja.

Por lo expuesto, a unos no se les puede requerir un nivel de exigencia máxima y otros con más peso no dan la talla esperada. Puede ser hasta entendible que Gallego busque alternativas para mejorar, aunque para los experimentos están los entrenamientos. En cualquier caso, si se llega a ganar en Las Palmas y al Albacete, que hubiera sido más lógico, la lectura de la situación sería muy diferente, como pasó tras el empate de Mallorca y la victoria ante el Sabadell, pero con una clasificación mejor.

En cualquier caso, lo conveniente es pensar que faltan 22 puntos para la permanencia. Luego, ya veremos. Salvo cuatro equipos, no se ve superioridad, pero este Sporting es un equipo en formación y demasiado irregular. Esto es lo que hay.