La entrega de las medallas de la ciudad tuvieron ayer un sabor agridulce porque dejaron ver a todas luces que los miembros de la Corporación ... municipal no son capaces de aparcar sus diferencias políticas e ideológicas ni siquiera para entregar las máximas distinciones de Gijón. Y es una pena, porque tanto la Policía Nacional, los profesionales de Atención Primaria del Área V, el equipo de Salvamento Marítimo y los cofrades de la Semana Santa se merecen el mayor de los respetos, ya que fueron elegidos de forma consensuada por nuestros representantes en el Ayuntamiento para ser premiados por su contribución a hacer de Gijón una ciudad mejor.
La entrega de honores y distinciones no puede tomarse como una afrenta y los grupos municipales, todos ellos, deberían tener altura de miras. ¡Claro que hay estar en la manifestación por el Día del Orgullo! Cuanto más seamos, mejor, porque, lamentablemente, queda muchísimo por hacer. Pero también hay que acudir a la entrega de medallas de oro y de plata por respeto a los premiados y a los gijoneses y gijonesas. Los malabarismos políticos entre el equipo de gobierno y la oposición (IU y Podemos, en este caso), 'que si te cambio la butaca un poco más allá', 'que si te arrogas todo el escenario para ti', no deberían embarrar este solemne acto que tendría que hacer de Gijón un lugar mejor para todos. Al menos, durante las dos horas de ceremonia en el teatro Jovellanos. Orgullo, sí, pero con respeto.
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