Actitudes insólitas

Una de las funciones del entrenador es corregir en los partidos lo que se esté ejecutando mal. En el caso del técnico canario, al menos el domingo, no se enteró mucho de cómo se produjeron las equivocaciones. Tuvo que esperar a ver la grabación del lance. Un poco tarde.

Resulta chocante que esto le pase a Ramírez. Aquí es el que sabe de fútbol e incluso se permite la licencia de darle clases al presidente Irarragorri, según aseveró el viernes. Suena a vodevil. En cambio, lo visto en el terreno de juego se asemeja a un drama. El dato más relevante del partido ante el Villarreal B fue dejarse sorprender por Ontiveros en el enganche, con una libertad que el míster rojiblanco habrá podido detectar en los vídeos. En el campo se vio desde el minuto uno. Fueron tres goles, pero pudo ser alguno más. Hubo más cuestiones raras. ¿Zarfino está recuperado? ¿Qué se analiza en las citas a canteranos? Óscar Castro jugó 90 minutos el sábado en Mieres y Ramírez lo citó el domingo por la mañana. Extraña planificación o lesiones ocultadas.

Sin embargo, pese a las malas sensaciones que transmite este Sporting, en la clasificación está empatado con el sexto. Da más rabia analizar lo que se regaló. El equipo gijonés podía estar ahora en una situación de privilegio. El análisis positivo de futuro es que un triunfo en Cornellá daría un espaldarazo para pensar en el 'play off', aunque, tal y cómo están casi todos los equipos, parece que meterse arriba es un castigo.

El Espanyol tiene un equipazo, pero no lo demuestra mucho. Va por el tercer entrenador. El Sporting se juega meterse en el 'play off' y los catalanes, ahora cuartos, necesitan recuperar terreno, porque su premisa es el ascenso directo. Ahora lo tienen crudo. El partido será tenso en el césped y tal vez en el palco por la reclamación del club 'perico' al rojiblanco por el 'caso Pedro', destapado por Javier Barrio en este periódico, que puede costarle a la entidad gijonesa cinco millones de euros. A las brillantes instalaciones de Mareo le hacen falta ejecutivos competentes, para no tener que recurrir a créditos para disponer de liquidez.

Muchos disgustos le dan al señor Irarragorri. Si el pasado sábado pudo disfrutar de la pura atmósfera de Quintes, el domingo le dieron un bofetón con el 0-3. Ahora está a la espera de que le arreglen la demanda del Espanyol para no aumentar la deuda. Se arreglaría con un ascenso. A ver qué sorpresas nos reserva el míster y qué grado de intensidad enseñarán los 'artistas'. La ilusión no se pierde, pero la confianza está tocada, aunque a medida que llega el domingo van aparcándose las dudas.