Un punto para prolongar el sueño
Empatar en el campo del rival más favorito del grupo, aunque no lo demuestre habitualmente, es un buen resultado, pero un punto vale de poco ... a estas alturas. Al Sporting le sirve para seguir mirando con algo de ilusión las posiciones de 'play off'.
La igualada del Sporting en Cornellá fue justa. Parecía que era el objetivo en el planteamiento de Ramírez, quien puso un buen dispositivo de contención, pero con escasas opciones de enseñar algo de ambición ofensiva. Así es difícil jugar de delantero. Al portero local Joan García solo lo asustaron dos disparos de Mario y Queipo, que no fueron ni a portería.
El Espanyol, más exigido al jugar en su campo, también careció de ideas. En parte fue mérito de los rojiblancos, aunque la defensa gijonesa empezó con algún titubeo. En última instancia siempre apareció Yáñez, sobresaliente en tres jugadas puntuales.
Esta vez, el dispositivo del Sporting dio imagen de tener cierta coherencia, aunque sobre el papel se vieron detalles del conservadurismo que distingue a Ramírez. Guille Rosas muy apalancado en su zona, los pivotes mirando más para atrás y los de adelante enseñaban más preocupación por cerrar espacios que por hacer daño. Así se elaboró el 0-0. Pues eso, que seguimos con el sueño.
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