Los grupos consensúan los objetivos generales del PGOU con dudas sobre su desarrollo

Los cinco grupos municipales están de acuerdo en algo. Eso ya casi justifica estas líneas. Casi con que lo hicieran los tres socios de gobierno ya valdría. La realidad es más prosaica. Los partidos se reunieron ayer para consensuar los objetivos generales de la futura revisión del Plan General de la ciudad. «Ahí es fácil estar de acuerdo», resumió el portavoz de Ciudadanos, Luis Pacho. Los fines oficiales son la adaptación del ordenamiento actual, aprobado por el PP en solitario tras un pacto con la patronal de la construcción en 2006, al marco legal vigente. Normas que, como la Ley del Suelo, caminan en sentido contrario a lo que se hizo entonces para recalificar un millón de metros cuadrados de suelos rurales para viviendas protegidas (hasta 11.000) en baja o media densidad. Legislación que habla, después de los excesos, de rehabilitación, de respeto al medio natural o de sostenibilidad económica, social y medioambiental, cohesión territorial y eficiencia energética.

Para el PP, por obvia, la reunión estuvo «vacía de contenido», señaló su portavoz adjunto, Gerardo Antuña. Para el concejal del ramo, Ignacio Fernández del Páramo, el consenso alcanzado ayer «es un punto de partida para abordar la próxima semana los objetivos particulares de la revisión». Y ahí empiezan los roces. Los populares mostraron su malestar porque el edil de Urbanismo les haya citado para el próximo día 30, pidiéndoles que lleven sus propuestas «sin que hayamos visto ninguna suya».

Las del equipo de gobierno viajan en el documento que Del Páramo entregó al resto de grupos la semana pasada. Hablan de buscar un nuevo modelo de ciudad que dé marcha atrás, donde se pueda, a los excesos anteriores; que priorice el desarrollo de El Cristo y La Vega; la transformación del acceso desde la 'Y' y la Ronda Sur; que apueste por la regeneración de la ciudad consolidada; y por definir la integración de Oviedo, como capital y centro del 'ocho' asturiano. Para Luis Pacho, son aún «cuestiones muy genéricas». El portavoz de Ciudadanos apoyó expresamente aprovechar «la potencialidad como capital del área central», pero echó en falta algunas cuestiones como que el plan de Movilidad, de nuevo en revisión, «se refleje en el PGOU».

Sí hubo coincidencia con el equipo de gobierno en que el modelo que define el actual ordenamiento es «caduco» y en que es necesario definir otro. El problema será el cuál. Del Páramo defendió que hará esfuerzos para llegar a un consenso político, «necesario», dijo, para diseñar el futuro de Oviedo, pero también en acotar plazos. «Tenemos que ponernos a trabajar duro, semana a semana», señaló, con el fin de contratar cuanto antes la asistencia técnica que desarrollará la revisión.

Lo malo será también pasar de lo general a lo particular. Pacho expresó ayer los recelos de su grupo ante los planes del equipo de gobierno de intentar revertir los suelos urbanizables inviables. «Puede generar conflicto, somos más partidarios de una reprogramación», defendió su portavoz, que reclamó que el equipo redactor se reúna con los grupos para ir dando cuenta de los trabajos durante su desarrollo.