Alquilar un piso en Oviedo cuesta 272 euros más al mes que hace una década

Mientras unos señalan al Gobierno de las cada vez más profundas reticencias de los propietarios para alquilar y otros encuentran el culpable en el aumento de los pisos turísticos, lo cierto es que la situación no tiene visos de mejorar y que cada vez se está volviendo más complicado encontrar un piso a buen precio en la ciudad. Al mismo tiempo, falta un parque de vivienda pública que sirva para cubrir las necesidades de los jóvenes que, solos o en pareja, busquen independizarse y para quienes, con sueldos medios, se vuelve una tarea delicada de enfocar.

Por poner sólo un ejemplo de los muchos que cualquiera puede encontrar a golpe de clic en los principales portales inmobiliarios, un bajo de 48 metros cuadrados en la calle Joaquín Bobela cuesta 650 euros al mes. Hasta las habitaciones en pisos compartidos, la opción más económica, cuestan el doble que hace unos años: unos 300 euros al mes, de media, gastos aparte.

En números redondos, los precios han crecido un 12% en un año y donde más lo hacen (un 13,5%) es en los barrios de La Florida, Las Campas y Vallobín. También crece la renta (en un 11,9%) en zonas de precios históricamente bajos como La Tenderina, Fozaneldi y Ventanielles, donde el metro cuadrado alcanza los 8,6 euros. La nueva normalidad del alquiler en Oviedo, si bien no es ni por asomo una de las ciudades españolas con el mercado más tensionado, es que un piso de menos de ochenta metros cuadrados en la zona de El Milán pase de los mil euros al mes.