Los guías turísticos piden regular los 'free tours' y el uso masivo de altavoces en Oviedo
Solicitan al Ayuntamiento que limite los grupos a treinta personas y reduzca la «contaminación acústica»
El pulso del turismo en Oviedo es positivo, con más trabajo que el año pasado para los guías turísticos, que defienden su papel y reclaman una regulación que ordene el sector, ponga coto a la masificación y apueste por un modelo sostenible. «Yo tengo más trabajo este año que el pasado verano», compara Ana Posada, presidenta de la Asociación Profesional de Informadores Turísticos (APIT).
A pesar del buen momento, el sector afronta un desafío mayúsculo: la proliferación de 'free tours'. René García, guía oficial con 35 años de experiencia, es contundente al analizar este modelo. «Desde un punto de vista laboral, me parece una degradación de la persona. Un profesional que ha sacado una carrera y una titulación no puede depender de la voluntad. Cualquier profesión sabe lo que va a ganar antes de trabajar; aquí no», critica. Para él, es «pan para hoy y hambre para mañana».
El impacto se siente también en la calle. El uso de altavoces es uno de los principales caballos de batalla. «Cuando nos juntamos muchos a la vez con los micros, es molesto, yo lo entiendo», admite Posada. García va más allá, describiendo la situación como una «contaminación acústica» que tiene a los vecinos «hasta las narices». «Solo en Oviedo se están haciendo entre 75 y 90 'free tours' al día, todos con altavoces», asegura. Ambos coinciden en la solución: una regulación que limite el tamaño de los grupos a treinta personas y elimine los altavoces, una petición que ya han trasladado por escrito al Ayuntamiento de Oviedo. «Hasta hoy, no nos han hecho ningún caso», lamenta García.
Para los guías profesionales, el futuro de la profesión es «necesario». Su valor, insisten, radica en transformar una simple visita en una experiencia memorable. «La gente que hace una visita guiada siempre lo dice: 'jolín, pues estaba aquí mil veces y nunca me lo habían explicado'», comenta Posada.
Partidos del Oviedo
El gran objetivo a largo plazo es combatir la estacionalidad, consolidando a Asturias como un destino atractivo también en invierno. El ascenso del Real Oviedo a Primera División, apunta García, será un impulso clave. «Hay un determinado turismo que viaja a partidos. No es lo mismo la afición del Real Madrid o del Barça que la de otros. Esto atraerá a peñas que aprovechan y hacen excursiones».
La demanda turística, explica Posada, sigue anclada en los grandes clásicos. El «sota, caballo y rey» de las visitas no falla. En Oviedo, el recorrido sigue siendo el «casco histórico, la Catedral y los prerrománicos». Sin embargo, se detectan brotes verdes en las preferencias de los visitantes, como el interés por el modernismo o el patrimonio industrial. Las experiencias gastronómicas están en auge. «El tema de experiencias está de moda, de cómo se hacen las moscovitas, la sidra, que tras ser declarada Patrimonio de la Humanidad, más aún», confirma Posada.