«Que me mata, llama a la Policía», el grito de auxilio de una mujer tras asestarle dos cuchilladas su pareja en Oviedo

«Que me va a matar, que me mata, llama a la Policía, que me va a matar, que me mata, que me mata». Fue la llamada de auxilio de una mujer en Oviedo después de que su pareja la intentara matar el 15 de julio de 2023. Así lo recoge en el escrito de acusación la Fiscalía Superior del Principado de Asturias. Fue una llamada de auxilio, «con el arma todavía incrustada en el cuerpo», que lanzó en plena calle tras lograr salir de casa. Su pareja, que le había asestado dos cuchilladas, salió tras ella tratando de que regresara; pero la víctima pudo ser socorrida por una persona que se encontraba en las inmediaciones. El presunto agresor se enfrenta a casi 15 años de cárcel.

Según recoge la acusación pública, a las siete y veinte de la mañana de aquel 15 de julio, el hombre, ahora de 46 años, «con el ánimo de matarla, entró en la habitación con una navaja táctica de punta filada, nueve centímetros de longitud y tres centímetros de ancho y le asestó dos cuchilladas. La primera de ellas le alcanzó en la pierna izquierda y la segunda, en el pectoral izquierdo». Actuó de manera sorpresiva y «sin que conste que hubiera ocurrido ningún incidente extraordinario». Se enfrenta a casi 15 años de cárcel.

La Fiscalía considera que los hechos son constitutivos de un delito de asesinato en grado de tentativa del artículo 139.1.1º, en relación con los artículos 16 y 62, todos ellos del Código Penal. Concurren las circunstancias agravantes de razones de género y de parentesco y ss solicita que se condene al procesado a 14 años, 11 meses y 29 días de prisión, con inhabilitación absoluta; y prohibición de aproximarse a la víctima a menos de 500 metros durante un periodo superior en ocho años al de la pena de prisión que se le imponga en sentencia, a su domicilio, lugar de trabajo o cualquier otro que frecuente, aunque no se encuentre en él; prohibición de comunicarse con ella por cualquier medio durante el mismo periodo de tiempo; y libertad vigilada durante ocho años.

Además del abono de las costas procesales, en concepto de responsabilidad civil, el Ministerio Fiscal solicita que el procesado indemnice al Sespa por los gastos médicos ocasionados, más los intereses legales correspondientes.

La víctima –quien sufre una cicatriz lineal en la cara anterior del hemitórax izquierdo y otra en el interior de la pena izquierda–, ha renunciado a las acciones civiles y penales que pudieran corresponderle

Hoy está previsto que el presunto agresor se siente en el banquillo de los acusados de la Sección Tercera de la Audiencia Provincial. Se encuentra en prisión provisional acordada por el Juzgado de Violencia de la Mujer número 1.

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