El IES Monte Naranco recoge alimentos para ayudar a 40 familias del centro afectadas por el COVID-19

La crisis sanitaria provocada por el coronavirus ha puesto de manifiesto los graves problemas a los que se enfrentan muchas familias asturianas. Dentro del ámbito educativo, parecía que la brecha digital era el primordial, pero, con el tiempo, directores y docentes han descubierto que hay «necesidades aún más acuciantes». Es lo que ha ocurrido en el instituto Monte Naranco de Oviedo. «Cuando empezamos a repartir tablets y ordenadores, nos dimos cuenta de que había familias que lo estaban pasando verdaderamente mal y que era urgente ayudarles», explica la directora del centro, Alejandra González Pulido.

Fue así como surgió la iniciativa de organizar un banco de alimentos en el instituto para apoyar a 40 familias en extrema necesidad. Al principio, fueron los propios profesores los que fueron aportando leche, pasta, legumbres, conservas, aceite, patatas, fruta..., para organizar los lotes. A ellos se han ido sumando personal no docente, las familias (ahora que se han reducido las limitaciones de movimiento para ir a donar) e, incluso, antiguos alumnos que han visto la iniciativa en la red social Facebook del centro y se han unido para colaborar y enviar un pedido.

El reparto comenzó ayer, miércoles y se prolongará hasta el 10 de junio. Los lotes se depositan en cajas a la entrada del centro para garantizar las medidas de seguridad y los interesados pueden pasar a recogerlos entre las nueve de la mañana y la una de la tarde. Hoy mismo han acudido catorce familias.

Hay entre 600 y 700 familias en el centro, todas dispuestas a colaborar. No obstante la presidenta a la Asociación de Padres y Madres (AMPA) del instituto, Sara López Fombella, recuerda que no es una iniciativa cerrada, sino abierta a todo aquel que quiera aportar. A través de las redes sociales cuelgan los productos que se van necesitando para que el que esté interesado los pueda adquirir y solidarizarse con quienes más lo necesitan en esta crisis.