La anciana muerta en Ciudad Naranco tenía problemas con su hija
La Policía Nacional investiga si la mujer, que se precipitó al patio por la ventana, pudo haber cometido un parricidio
De Ciudad Naranco «de toda la vida». E. M. R. N., la mujer de 45 años que el viernes por la tarde se precipitó a un patio de luces desde su vivienda, un quinto piso del número 30 de la calle Augusto Junquera, y su madre, una octogenaria cuyo cadáver encontraron los agentes de la Policía Nacional momentos después con aparentes signos de violencia y de llevar varios días muerta, eran conocidas en el barrio. «Salían mucho a pasear, aunque hacía tiempo que no las veía», señaló ayer una comerciante de un local cercano, aún sorprendida por la tragedia. Los agentes investigan lo ocurrido «con todas las líneas abiertas», incluido un posible caso de homicidio.
La hija permanece ingresada en el Hospital Universitario Central de Asturias en estado grave, aunque en principio no se teme por su vida. «Siempre iba muy arreglada, impoluta», la describió. La madre, «como si estuviera enferma, con poca vitalidad», se había quedado viuda hace años. «El padre, que murió hace ya tiempo, que era muy sociable, eso sí lo recuerdo», indicó.
Desde su ventana, Rita Álvarez observó en varias ocasiones, a través del patio de luces desde donde se tiró E.M.R.N., situaciones complicadas en el interior de la casa de esta familia: «Veía lo que pasaba y siempre estaba con la madre a empujones y voces; todo era muy desgradable y se veía venir. No de ahora, de hace ya tiempo», lamentó ayer este mujer, aún conmocionada por el trágico suceso.
Los vecinos explicaron que la Policía había acudido en varias ocasiones al domicilio. Ellos mismos llamaban para alertar de los gritos. La octogenaria, describió Álvarez, «era menudina y se veía que estaba enferma». La chica, según coincidieron quienes las conocían, y su madre mantenían una complicada relación. «A veces la madre le reprochaba que no se había tomado la medicación», indicaron.
Los hechos ocurrieron el viernes.Pasadas las cuatro de la tarde se activó el dispositivo policial: una llamada alertó de que una mujer se había precipitado al patio interior. Tras conocer que vivía con su madre, los agentes acudieron el piso, el 5D, pero nadie les abría, por lo que forzaron la puerta. En el interior se encontraron con el cuerpo de la anciana, por lo que se hizo cargo del caso la Policía Judicial y Científica. A las siete de la tarde se levantó el cadáver, que fue trasladado al Instituto de Medicina Legal. La mujer, con un grave politraumismo, permanece en el HUCA.