La restauración de la capilla de los Vigiles se pospone hasta julio y costará 367.000 euros

Hace una década logró que el Gobierno regional destinase 61.000 euros para la redacción del proyecto.Este apuntó la necesidad de una inversión de 450.000 euros para devolverle su esplendor original. Por falta de recursos, los planes se retrasaron. Hasta que el Gobierno de Mariano Rajoy se comprometió a financiar la obra e incluyó una partida en los presupuestos generales del Estado de 2018. Las cuentas fueron aprobadas en el Congreso de los Diputados en junio, gracias al apoyo de siete formaciones políticas distintas y entre las que está el Partido Popular, Ciudadanos y Foro Asturias, y ahora, tras varios retrasos administrativos, el Ministerio de Cultura espera que la restauración arranque en julio de 2019.

El proyecto, que cuenta a nivel técnico con el visto bueno del Instituto del Patrimonio Cultural de España, se encuentra en la actualidad en la oficina de Supervisión. Según indican fuentes ministeriales, los técnicos estatales emitirán de forma «inminente» un informe. Después se procederá a la licitación de las obras por 367.000 euros, con un plazo de ejecución de seis meses. Con la adjudicación, los operarios podrán empezar a trabajar. El objetivo de la cartera liderada por José Guirao es que en enero de 2020 la capilla vuelva a lucir como en su estado original.

Los responsables de la Catedral ya tienen todo preparado para facilitar la restauración. El déan, Benito Gallego, detalló que ya «han retirado» los bancos. Está muy pendiente de los detalles y en contacto con la sección de Patrimonio del Principado para ver cómo va el proceso de contratación.

La capilla se erigió entre 1627 y 1640, con tres arquitectos (Naveda, De la Huerta y Manzano) al frente. Su nombre se debe al impulsor, el obispo Juan Vigil de Quiñones. Pintada en blanco y dorado, no llegó a policromarse por desavenencias entre los herederos de Vigil. En su interior destaca el retablo de la Anunciación de Luis Fernández de la Vega, hecho en madera. También la iluminación superior, la estatua orante del religioso, los relieves o la sillería de labra escultórica.

En los Vigiles ya hubo una actuación en 1997 para acabar con las filtraciones de agua a través de una cubierta ventilada, la única de piedra de la Catedral. Ahora, la intervención se centrará en arreglar la pared pétrea, el retablo–propuesto por el Principado para ser Bien de Interés Cultural (BIC)– dañado por la humedad en su soporte y dorados, la rejería que ha perdido el color y el cierre histórico. También, ya en un plano arqueológico, se quiere recuperar la traza original de la nave sur de la basílica que levantó Alfonso II 'El Casto', derruida para permitir la construcción de la capilla.

La restauración de la capilla de los Vigiles no es la única que se acometerá próximamente en la Catedral. El Cabildo entregó hace una semana el proyecto de reforma de los retablos de las girolas, según apuntó el deán. Cada uno de estos documentos ha sido realizado por un técnico diferente.Los firman Jesús Puras, Luis Suárez Saro, Pablo Klett, Paula Sánchez Ablanedo y Natalia Díaz. Ahora están a la espera de que el Principado les comunique su valoración.

Estas obras, que serán íntegramente financiadas por el Cabildo, no tienen por el momento plazo de ejecución.Serán las segundas que se acometan en los últimos doce años. En concreto, en 2006 la empresa MC Conservación y Restauración S. L reparó diversas humedades.