Calor asfixiante en una noche con sabor a triunfo
El fútbol sigue sin color por la falta de afición visitante en las gradas. Los familiares de los jugadores fueron los que dieron oxígeno al equipo
M. SUÁREZ
HUESCA.
Martes, 7 de septiembre 2021, 05:56
Más de 30 grados aún bien entrada la noche y un calor asfixiante a pesar de que El Alcoraz se encuentra a las afueras de ... la ciudad, donde la sensación térmica era aún más asfixiante. El escenario no era fácil y los oviedistas no pudieron empezar mejor. Aunque tenían a su afición a más 600 kilómetros, una pequeña representación de familiares de los futbolistas se encargaron de llevar los cánticos de 'Oviedo' al campo oscense. Desde el fondo en el que empezó defendiendo la portería Femenías intentaron contrarrestar los ánimos de la afición local, que abarrotó la grada en una noche que invitaba a ver fútbol y a hidratarse a partes iguales.
Los socios del Huesca apretaron más si cabe al verse por debajo en el marcador y eso hizo que el partido recuperase el alma que solo le puede dar tener al público en los campos. Aplausos, pitidos y ánimos, en un estadio en el que las distancias entre grada y césped son de lo más cortas, dieron color al juego en un partido que recordaba de un modo poético que a los futbolistas, tras año y medio viéndolos por la tele, casi se les puede tocar. Solo faltaba un ingrediente, uno principal: la afición oviedista ocupando las calles oscenses, siendo la garganta del fondo más huérfano de El Alcoraz.
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