Luismi da el susto con su rodilla izquierda y Miguelón no se entrena por precaución

Con Luismi, la circunstancia ha sido totalmente diferente y más aparatosa. El mediocentro, cuya baja a principio de liga fue la única motivada por un golpe y no por un problema muscular, inició la sesión con el grupo pero no pudo completarla debido a un mal gesto de su rodilla izquierda. El jugador carbayón, con sangre en la misma tras rasparse en un momento del entrenamiento, tuvo que parar tras notar una molestia en la cara interna de dicha rodilla. Así se lo explicó al médico mexicano que desde la llegada de Grupo Pachuca cuida del bienestar de los futbolistas azules a pie de campo, César Gómez. La decisión para con el gaditano también fue inmediata: parar y evaluar daños antes de que la dolencia, que no remitía, fuese a más. Bolo, molesto con el lance, señaló el estado del césped varias veces antes del término de la sesión.

Las dos bajas sobrevenidas de la sesión de ayer se suman a las ya sabidas de Borja Sánchez, Koba Lein y Dani Calvo. Y es que la enfermería azul no sabe tomarse un respiro esta temporada. El que más tiempo lleva en ella de los tres jugadores es el canterano, que se lesionó en el choque ante el Ibiza y desde entonces trabaja al margen para recuperarse de su problema muscular. Lleva ya casi tres semanas sin poder contar, no ha estado ante Lugo y Cratagena, y todo apunta a que se perderá los próximos tres encuentros de los azules: Zaragoza, Huesca y Albacete.

En una situación similar está Koba Lein, aunque en el caso del francés, su problema llegó una semana después, en el Anxo Carro. El centrocampista azul se recupera en El Requexón y se dejó ver ayer en el campo número cinco, aunque solo como espectador. Preocupa también la ausencia de Dani Calvo. Sus molestias, las que le impidieron ir convocado contra el Cartagena, le apean ya también del día a día oviedista y, a falta de parte médico, empiezan a coger forma también de problema muscular a tener en cuenta.

Quedan tres días para evaluar si Luismi y Miguelón engrosan esa lista o vuelven a ser una de las cartas de Jon Pérez Bolo para revertir la situación en La Romareda.