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Anelka (izquierda) y Peter Dubovsky, en un partido disputado contra su exequipo, el Real Madrid
15 años sin Peter Dubovsky

15 años sin Peter Dubovsky

El futbolista del Real Oviedo fallecía tal día como hoy en 2000 al despeñarse por unas cataratas en Tailandia

Eva Vélez

Martes, 23 de junio 2015, 10:21

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Los aficionados al fútbol, y en especial los seguidores del Real Oviedo, recuerdan hoy una fecha trágica en el calendario. Hoy, 23 de junio, se cumple el décimo quinto aniversario del fallecimiento del futbolista eslovaco Peter Dubovsky, en un trágico accidente en Tailandia, mientras disfrutaba de unas paradisiacas vacaciones junto a su novia Aurelia, su hermano y su cuñada.

El 24 de junio los asturianos se despertaron con la tragedia. El delantero oviedista Dubovsky se había precipitado desde una altura de veinte metros en las cataratas de Ko Samui. En aquella época, presidía la entidad azul Eugenio Prieto, mientras que Luis Aragonés era el entrenador del equipo. La fatalidad se cebó en Peter, perdió mucha sangre antes de poder ser atendido, ya que el lugar donde cayó era de difícil acceso. Fue diagnosticado con una hemorragia cerebral, rotura de pelvis y varias costillas. Las horas transcurridas desde el accidente hasta su ingreso hicieron imposible su recuperación, según el parte médico oficial.

La noticia causó una honda conmoción en el mundo del fútbol, especialmente en el español y en el eslovaco. En Asturias, Peter Dubovsky dejó numerosas amistades y un recuerdo imborrable, convirtiéndose en uno de los jugadores más emblemáticos del club carbayón. Militó en el Real Oviedo durante cinco temporadas, en las que además de calidad demostró tener un gran carisma, ganándose al público del Tartiere y siendo uno de los jugadores más recordados por la afición oviedista. La muerte del futbolista, y en las condiciones en las que se dio, supuso un fuerte golpe para el Real Oviedo y para la ciudad. La tragedia se completó con el descenso del equipo al año siguiente.

La muerte de Dubovsky provocó numerosas reacciones. Así el vicepresidente del Real Madrid en 2000, Juan Onieva, manifestó que "es una enorme pérdida. Era un gran jugador y una magnífica persona. Fue un jugador muy querido por la afición del Real Madrid y él también quería al club. Siempre había dicho que sus mejores años en España fueron los que pasó aquí".

Por su parte, el entrenador Juan Manuel Lillo, que coincidió con el jugador en el Oviedo, lamentó también su pérdida. Lillo solía hablar por teléfono con el eslovaco. "De aquella época nos quedó una buena amistad", precisó el entrenador al recordar a un Dubovsky por el que siempre mostró una gran admiración, y que según aseguraba el propio futbolista le había ayudado a jugar a su mejor nivel después de un paso fugaz por el Real Madrid.

Entre otras reacciones hay que apuntar los telegramas enviados a la familia por el secretario de Estado para el Deporte en el año 2000, Gómez Angulo, y el Atlético de Madrid a la familia del malogrado jugador.

Trayectoria deportiva

Peter Dubovsky nació un 7 de marzo de 1972 en Bratislava, entonces Checoslovaquia, hoy Eslovaquia. Empezó su carrera en el FK Vinohrady Bratislava, para ser traspasado luego al poderoso Slovan de Bratislava en 1993. Ese mismo año fichó por el Real Madrid por 700 millones de pesetas. En el Bernabéu jugó dos años. En un equipo blanco presidido por Ramón Mendoza, el eslovaco llegó al Madrid con sólo 21 años y con el halo de ser el mejor futbolista de su país para hacer frente al Barcelona que dominaba la liga a principios de los 90, el Dream Team de Johan Cruyff.

Pero el eslovaco no triunfó en el Real Madrid. El primer año jugó bastante, pero con sequía goleadora. Al año siguiente, con Valdano en el banquillo, el eslovaco pasó una temporada casi en blanco, y al final se decidió su traspaso al Real Oviedo.

Y fue aquí, durante 5 temporadas, donde Dubovsky demostró su casta de futbolista. Seguía siendo un delantero con poco gol, pero tenía calidad, regate, buen toque de balón con la zurda, tiraba bien las faltas Era un jugador frío pero con carisma, de los que enganchaba al público, y así tardó muy poco en ganarse el cariño de la gente que iba al Carlos Tartiere.

El Real Oviedo retiró durante un tiempo el dorsal con el número 10 a modo de homenaje y en su memoria, desde 2001 la Federación Eslovaca de Fútbol entrega anualmente el premio Peter Dubovský al mejor futbolista sub-21 de Eslovaquia.

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