El Real Oviedo no encuentra lo que quería en el mercado y no ficha
El club trabajó hasta última hora la incorporación de Etta Eyong, pero el Villarreal prefirió las condiciones que aceptó el Levante
Hay en el mundo taurino una frase que resume a la perfección lo vivido por el Real Oviedo en el último día de mercado de fichajes: «Tarde de expectación, tarde de decepción». Todo el mundo esperaba algún movimiento que reforzase el ataque del equipo, pero las condiciones del mercado se volvieron en contra de los azules, que vieron cómo sus primeras opciones se esfumaban y los ofrecimientos que iban llegando no terminaban de satisfacer a los técnicos.
Así hasta que finalmente decidieron dar por cerrado el día y la plantilla se queda con los 25 jugadores que están inscritos, aunque cabe la posibilidad de que haya alguna salida ya que algunos mercados aún permanecerán abiertos algunos días más. Lo que está claro es que los carbayones no han agotado su tope salarial y quedan a la expectativa de lo que pueda suceder con algún jugador que quede libre en las últimas horas y, si no, llegará bien posicionado al mercado de invierno.
Hubo un nombre que destacó por encima de todos los demás en los deseos del Oviedo. Etta Eyong se convirtió en la joya de la corona de este último día y el Levante fue el que mejor maniobró para hacerse con él. El Oviedo tuvo su nombre encima de la mesa desde los primeros días de mercado. El Villarreal siempre tuvo claro que dejaría salir al joven atacante, pero Marcelino García Toral lo quiso tener a sus órdenes durante la pretemporada. Su buen rendimiento le hizo ser titular contra el Oviedo y además anotó el 1-0. Repitió titularidad en el 5-0 al Girona. Y volvió a ser clave en el 1-1 del pasado domingo en Vigo.
La llegada de Georges Mikautadze, por el que los amarillos han pagado 30 millones de euros, le cerró la puerta de forma definitiva. El Oviedo se unió a la lista de aspirantes, en la que también estaban el Betis, el Stuttgart y el Levante. Los granotas fueron los únicos que no pusieron reparos a todas las condiciones impuestas por el Villarreal y además ganaron la partida en la negociación con los agentes del jugador. Pagan 3 millones de euros por el 50% de sus derechos y el conjunto cerámico se guarda la posibilidad de recomprarlo en unas condiciones muy ventajosas al final de la temporada o bien se reserva un porcentaje importante de una futura venta. Ahí chocaron los intereses del Oviedo y de otros aspirantes que se quedaron sin el jugador.
La lista de ofrecimientos que llegaron a las oficinas azules fue interminable. Entre otros muchos apareció el francés Simon Banza, propiedad del Braga, que podía venir como cedido incluyendo una obligación de compra elevada al término de la temporada, lo que echó para atrás la operación, que se cifraba en el entorno de los 10 millones de euros. El inglés Patrick Brandford, recientemente rescindido en el Leeds United, también pasó por la mesa oviedista, como algunos viejos conocidos del fútbol español como Toko Ekambi y Cedric Bakambu, también su compatriota Vincent Aboubakar y el delantero del Mallorca Larin, que terminó en el Feyenord. Nada terminó de cuajar y el equipo parece que se quedará como está hasta el mercado de invierno.
El último día de mercado fue frenético para muchos equipos, llevándose la palma el Sevilla. Uno de los jugadores que estuvo en el radar azul, Adrián Pedrosa, terminó recalando en el Elche. Ahora todo queda parado hasta diciembre.