Ruta hasta el pico La Mostayal

La Vara - Braña de Brañacé - Collá de Pan de la Forcá - Cumbre de La Mostayal - Collá de Pan de la Forcá - Braña de Brañacé - La Vara

La subida al pico de La Mostayal (1.301 m) que hoy te proponemos en 'De Montaña por Asturias' es uno de esos picos cercanos a Oviedo y Gijón, fáciles de hacer y con el que disfrutarás en cada minuto de la subida pero sobre todo con el regalo final desde la cumbre y donde podrás disfrutar de unas preciosas y amplias vistas a la costa asturiana, a los Picos de Europa, al Monsacro, al Puerto de San Isidro e incluso a los Puertos de Marabio.

La cumbre de La Mostayal es una montaña independiente que se encuentra dentro de la sierra del Aramo y que pertenece al concejo de Morcín. La ruta de hoy hasta este pico te llevará menos de cuatro horas entre ida y vuelta, no supondrán un gran esfuerzo ya que no cuenta con mucho desnivel y es una opción ideal para cualquier senderista que quiera ascender a una cumbre cercana a la capital ovetense o para quien quiera afrontar por primera vez la subida a una cumbre sin grandes esfuerzos.

Para comenzar con la ruta hasta La Mostayal, puedes partir desde Peñueres o desde La Vara, aunque el recorrido que hoy te proponemos es el más sencillo y el que parte desde este segundo pueblo situado a 550 m de altura.

Desde el pueblo de La Vara y nada más llegar a él encontraremos una pequeña plazoleta y a la derecha una carretera por la que ascenderemos con el coche unos dos kilómetros hasta alcanzar un pequeño aparcamiento y mirador justo en las campas de Ories y Bobies, donde podremos dejar aparcado nuestro coche.

Desde este punto podremos dar comienzo a la ruta de hoy primeramente hasta las Brañas de Brañacé. Un primer tramo que haremos por pista de tierra y que compensará por las bonitas vistas que nos iremos encontrando a cada paso.

Acabaremos llegando a la Braña de Brañacé.

Desde allí, antes de pasar la primera cabaña veremos un camino de tierra marcado con bloques de piedra justo a la izquierda, camino por el que tendremos que ascender para llegar a un cordal que une el Aramo y La Mostayal.

A la altura de las Brañas de Brañacé y antes de afrontar el camino de subida, también encontraremos a la izquierdala única fuente de la caminata de hoy donde podremos coger agua.

También podremos aprovechar para admirar las maravillosas vistas que tendremos desde este punto a la imponente pared caliza de Peña Mosquil y que veremos rodeada de praderías y ganado.

Desde este punto comenzaremos con el camino evidente en ascenso que nos conducirá hasta la Collá de Pan de la Forcá, otro de los puntos más bonitos de la ruta y en el que según vayamos ganando altura podremos alcanzar a ver numerosas montañas al oeste.

Una vez llegados a la Collá de Pan de la Forcá, unas marcas amarillas pintadas en la roca y varios hitos nos harán desviarnos hacia la izquierda para seguir nuestro camino cresteando hasta llegar a una precumbre, desde la que tendremos que afrontar la última subida para alcanzar la cumbre de La Mostayal.

Hay que destacar que en este último tramo antes de llegar a la cumbre, conviene tener cuidado, ya que es un tramo que se encuentra ligeramente expuesto a las grandes canales que descienden hacia La Vara, por lo que conviene estar atentos para evitar sustos.

Una vez superados estos últimos metros, ascenderemos hasta nuestro objetivo de hoy, la cumbre de La Mostayal. La reconoceremos fácilmente sobre todo por los dos buzones, la cruz de la cumbre y la imagen de la Virgen de Covadonga que encontraremos guardada en una caja de madera y cristal.

También llamará nuestra atención una losa de piedra en recuerdo al montañero José Manuel Valdés de la Vega fallecido en 1959 a causa de un rayo. Aunque el paso del tiempo y el musgo hacen que cueste leerla.

Una vez llegados a este punto de la ruta, será el momento de echar la vista al horizonte y disfrutar de este maravilloso balcón asturiano donde podremos localizar el Monsacro, el Aramo, el puerto de San Isidro, Redes, Picos de Europa, la cumbre del Cornón, el Macizo de Ubiña, la costa asturiana, el Cabo Peñas o los puertos de Marabio.

Una vista espectacular sobre todo si elegimos un día despejado para hacer esta ruta y que nos dará fuerzas para afrontar el camino de vuelta de nuevo hasta el aparcamiento, en las campas de Ories y Bobies.