Borrar
¿Quieres despedir a tu mascota? Puedes hacerlo en el nuevo canal de EL COMERCIO

Viernes, 8 de febrero 2019, 19:54

Modo oscuro

Indonesia se ha convirtido en la capital de exportación del kratom, un arbusto al que sus defensores atribuyen múltiples beneficios. Sus detractores, en cambio, advierten de que incrementa el riesgo de adicción, de abuso y dependencia. Su consumo se ha extendido por más de treinta países y preocupa sobre todo en Estados Unidos, Canadá y Europa.

Louis Anderson / AFP
Indonesia se ha convirtido en la capital de exportación del kratom, un arbusto al que sus defensores atribuyen múltiples beneficios. Sus detractores, en cambio, advierten de que incrementa el riesgo de adicción, de abuso y dependencia. Su consumo se ha extendido por más de treinta países y preocupa sobre todo en Estados Unidos, Canadá y Europa.
Indonesia se ha convirtido en la capital de exportación del kratom, un arbusto al que sus defensores atribuyen múltiples beneficios. Sus detractores, en cambio, advierten de que incrementa el riesgo de adicción, de abuso y dependencia. Su consumo se ha extendido por más de treinta países y preocupa sobre todo en Estados Unidos, Canadá y Europa.

Indonesia se ha convirtido en la capital de exportación del kratom, un arbusto al que sus defensores atribuyen múltiples beneficios. Sus detractores, en cambio, advierten de que incrementa el riesgo de adicción, de abuso y dependencia. Su consumo se ha extendido por más de treinta países y preocupa sobre todo en Estados Unidos, Canadá y Europa.

Louis Anderson / AFP
Indonesia se ha convirtido en la capital de exportación del kratom, un arbusto al que sus defensores atribuyen múltiples beneficios. Sus detractores, en cambio, advierten de que incrementa el riesgo de adicción, de abuso y dependencia. Su consumo se ha extendido por más de treinta países y preocupa sobre todo en Estados Unidos, Canadá y Europa.
Indonesia se ha convirtido en la capital de exportación del kratom, un arbusto al que sus defensores atribuyen múltiples beneficios. Sus detractores, en cambio, advierten de que incrementa el riesgo de adicción, de abuso y dependencia. Su consumo se ha extendido por más de treinta países y preocupa sobre todo en Estados Unidos, Canadá y Europa.

Indonesia se ha convirtido en la capital de exportación del kratom, un arbusto al que sus defensores atribuyen múltiples beneficios. Sus detractores, en cambio, advierten de que incrementa el riesgo de adicción, de abuso y dependencia. Su consumo se ha extendido por más de treinta países y preocupa sobre todo en Estados Unidos, Canadá y Europa.

Louis Anderson / AFP
Indonesia se ha convirtido en la capital de exportación del kratom, un arbusto al que sus defensores atribuyen múltiples beneficios. Sus detractores, en cambio, advierten de que incrementa el riesgo de adicción, de abuso y dependencia. Su consumo se ha extendido por más de treinta países y preocupa sobre todo en Estados Unidos, Canadá y Europa.
Indonesia se ha convirtido en la capital de exportación del kratom, un arbusto al que sus defensores atribuyen múltiples beneficios. Sus detractores, en cambio, advierten de que incrementa el riesgo de adicción, de abuso y dependencia. Su consumo se ha extendido por más de treinta países y preocupa sobre todo en Estados Unidos, Canadá y Europa.

Indonesia se ha convirtido en la capital de exportación del kratom, un arbusto al que sus defensores atribuyen múltiples beneficios. Sus detractores, en cambio, advierten de que incrementa el riesgo de adicción, de abuso y dependencia. Su consumo se ha extendido por más de treinta países y preocupa sobre todo en Estados Unidos, Canadá y Europa.

Louis Anderson / AFP
Indonesia se ha convirtido en la capital de exportación del kratom, un arbusto al que sus defensores atribuyen múltiples beneficios. Sus detractores, en cambio, advierten de que incrementa el riesgo de adicción, de abuso y dependencia. Su consumo se ha extendido por más de treinta países y preocupa sobre todo en Estados Unidos, Canadá y Europa.
Indonesia se ha convirtido en la capital de exportación del kratom, un arbusto al que sus defensores atribuyen múltiples beneficios. Sus detractores, en cambio, advierten de que incrementa el riesgo de adicción, de abuso y dependencia. Su consumo se ha extendido por más de treinta países y preocupa sobre todo en Estados Unidos, Canadá y Europa.

Indonesia se ha convirtido en la capital de exportación del kratom, un arbusto al que sus defensores atribuyen múltiples beneficios. Sus detractores, en cambio, advierten de que incrementa el riesgo de adicción, de abuso y dependencia. Su consumo se ha extendido por más de treinta países y preocupa sobre todo en Estados Unidos, Canadá y Europa.

Louis Anderson / AFP
Indonesia se ha convirtido en la capital de exportación del kratom, un arbusto al que sus defensores atribuyen múltiples beneficios. Sus detractores, en cambio, advierten de que incrementa el riesgo de adicción, de abuso y dependencia. Su consumo se ha extendido por más de treinta países y preocupa sobre todo en Estados Unidos, Canadá y Europa.
Indonesia se ha convirtido en la capital de exportación del kratom, un arbusto al que sus defensores atribuyen múltiples beneficios. Sus detractores, en cambio, advierten de que incrementa el riesgo de adicción, de abuso y dependencia. Su consumo se ha extendido por más de treinta países y preocupa sobre todo en Estados Unidos, Canadá y Europa.

Indonesia se ha convirtido en la capital de exportación del kratom, un arbusto al que sus defensores atribuyen múltiples beneficios. Sus detractores, en cambio, advierten de que incrementa el riesgo de adicción, de abuso y dependencia. Su consumo se ha extendido por más de treinta países y preocupa sobre todo en Estados Unidos, Canadá y Europa.

Louis Anderson / AFP
Indonesia se ha convirtido en la capital de exportación del kratom, un arbusto al que sus defensores atribuyen múltiples beneficios. Sus detractores, en cambio, advierten de que incrementa el riesgo de adicción, de abuso y dependencia. Su consumo se ha extendido por más de treinta países y preocupa sobre todo en Estados Unidos, Canadá y Europa.
Indonesia se ha convirtido en la capital de exportación del kratom, un arbusto al que sus defensores atribuyen múltiples beneficios. Sus detractores, en cambio, advierten de que incrementa el riesgo de adicción, de abuso y dependencia. Su consumo se ha extendido por más de treinta países y preocupa sobre todo en Estados Unidos, Canadá y Europa.

Indonesia se ha convirtido en la capital de exportación del kratom, un arbusto al que sus defensores atribuyen múltiples beneficios. Sus detractores, en cambio, advierten de que incrementa el riesgo de adicción, de abuso y dependencia. Su consumo se ha extendido por más de treinta países y preocupa sobre todo en Estados Unidos, Canadá y Europa.

Louis Anderson / AFP
Indonesia se ha convirtido en la capital de exportación del kratom, un arbusto al que sus defensores atribuyen múltiples beneficios. Sus detractores, en cambio, advierten de que incrementa el riesgo de adicción, de abuso y dependencia. Su consumo se ha extendido por más de treinta países y preocupa sobre todo en Estados Unidos, Canadá y Europa.
Indonesia se ha convirtido en la capital de exportación del kratom, un arbusto al que sus defensores atribuyen múltiples beneficios. Sus detractores, en cambio, advierten de que incrementa el riesgo de adicción, de abuso y dependencia. Su consumo se ha extendido por más de treinta países y preocupa sobre todo en Estados Unidos, Canadá y Europa.

Indonesia se ha convirtido en la capital de exportación del kratom, un arbusto al que sus defensores atribuyen múltiples beneficios. Sus detractores, en cambio, advierten de que incrementa el riesgo de adicción, de abuso y dependencia. Su consumo se ha extendido por más de treinta países y preocupa sobre todo en Estados Unidos, Canadá y Europa.

Louis Anderson / AFP
Indonesia se ha convirtido en la capital de exportación del kratom, un arbusto al que sus defensores atribuyen múltiples beneficios. Sus detractores, en cambio, advierten de que incrementa el riesgo de adicción, de abuso y dependencia. Su consumo se ha extendido por más de treinta países y preocupa sobre todo en Estados Unidos, Canadá y Europa.
Indonesia se ha convirtido en la capital de exportación del kratom, un arbusto al que sus defensores atribuyen múltiples beneficios. Sus detractores, en cambio, advierten de que incrementa el riesgo de adicción, de abuso y dependencia. Su consumo se ha extendido por más de treinta países y preocupa sobre todo en Estados Unidos, Canadá y Europa.

Indonesia se ha convirtido en la capital de exportación del kratom, un arbusto al que sus defensores atribuyen múltiples beneficios. Sus detractores, en cambio, advierten de que incrementa el riesgo de adicción, de abuso y dependencia. Su consumo se ha extendido por más de treinta países y preocupa sobre todo en Estados Unidos, Canadá y Europa.

Louis Anderson / AFP
Indonesia se ha convirtido en la capital de exportación del kratom, un arbusto al que sus defensores atribuyen múltiples beneficios. Sus detractores, en cambio, advierten de que incrementa el riesgo de adicción, de abuso y dependencia. Su consumo se ha extendido por más de treinta países y preocupa sobre todo en Estados Unidos, Canadá y Europa.
Indonesia se ha convirtido en la capital de exportación del kratom, un arbusto al que sus defensores atribuyen múltiples beneficios. Sus detractores, en cambio, advierten de que incrementa el riesgo de adicción, de abuso y dependencia. Su consumo se ha extendido por más de treinta países y preocupa sobre todo en Estados Unidos, Canadá y Europa.

Indonesia se ha convirtido en la capital de exportación del kratom, un arbusto al que sus defensores atribuyen múltiples beneficios. Sus detractores, en cambio, advierten de que incrementa el riesgo de adicción, de abuso y dependencia. Su consumo se ha extendido por más de treinta países y preocupa sobre todo en Estados Unidos, Canadá y Europa.

Louis Anderson / AFP
Indonesia se ha convirtido en la capital de exportación del kratom, un arbusto al que sus defensores atribuyen múltiples beneficios. Sus detractores, en cambio, advierten de que incrementa el riesgo de adicción, de abuso y dependencia. Su consumo se ha extendido por más de treinta países y preocupa sobre todo en Estados Unidos, Canadá y Europa.
Indonesia se ha convirtido en la capital de exportación del kratom, un arbusto al que sus defensores atribuyen múltiples beneficios. Sus detractores, en cambio, advierten de que incrementa el riesgo de adicción, de abuso y dependencia. Su consumo se ha extendido por más de treinta países y preocupa sobre todo en Estados Unidos, Canadá y Europa.

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

elcomercio Crece el consumo de kratom en el mundo