El Gobierno quiere prohibir fumar en coches particulares
El Plan Integral contra el Tabaquismo de Sanidad introduce la prohibición de consumir tabaco en playas y terrazas
el comercio
Miércoles, 8 de diciembre 2021, 21:13
El Gobierno cree que ha llegado el momento de dar una vuelta de tuerca más a las restricciones al consumo de tabaco y lo hace poniendo coto a diversos ámbitos hasta hace bien poco abiertos a la posibilidad de fumar. El Ejecutivo plantea en el Plan Integral contra el Tabaquismo la prohibición de fumar en coches particulares, terrazas de hostelería y playas. Las dos últimas posibilidades se pusieron ya en práctica durante la pandemia y son muchas las comunidades donde, aún cuando la incidencia había bajado de forma notable, se mantuvo esta restricción. La primera, la de prohibir fumar en coches particulares, es una nueva medida con la que se busca restringir el consumo de tabaco en un espacio que hasta ahora era territorio abierto para los fumadores.
El plan del Gobierno, que cubre el periodo 2021-2025, está ya en manos de sociedades científicas y comunidades autónomas, que tienen hasta el miércoles, día 15, para hacer sus aportaciones. En sus 119 páginas incluye otras medidas, como el empaquetado genérico de las diferentes marcas y la equiparación por ley de las restricciones del tabaco al cigarrillo electrónico. En el documento que firma el departamento dirigido por la ministra Carolina Darias se recuerda que la última modificación «sustancial» de las normas que luchan contra el tabaquismo datan de hace una década, y, guiado por las pautas que llegan de Europa, el Gobierno se plantea ahora el objetivo de lograr «una generación libre de tabaco». «Antes del año 2023» se propondrá incrementar los espacios libres de humo -lo que incluye también cigarrillos electrónicos y productos de tabaco calentado-, «especialmente en los espacios exteriores», una referencia implícita a las terrazas de bares y restaurantes y a las proximidades de los edificios públicos.
El ministerio de Darias también tienen como línea de actuación «impulsar la revisión de la fiscalidad para lograr un incremento y aproximación del precio de todos los productos del tabaco y de los dispositivos de calentamiento utilizados para su consumo», así como «promover que se graven los cigarrillos electrónicos con impuestos especiales».
El objetivo del plan es lograr la meta establecida por la OMS de una reducción relativa al 30 % en el consumo de tabaco para el año 2025, estableciendo la comparativa con los datos de 2010. Para conseguirlo, también se plantea subir la fiscalidad de estos productos.