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María Esteban, con la supuesta momia de Tutankamón.
Tras los secretos de Tutankamón

Tras los secretos de Tutankamón

El reto consiste en desentrañar una serie de enigmas con habilidad y lógica en la habitación del famoso egiptólogo Howard Carter

RUTH ARIAS

Domingo, 8 de mayo 2016, 00:56

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Hay una hora para salir de una habitación, pero la cosa no es tan sencilla como darle una vuelta a la llave, sino que para llegar a eso es necesario resolver antes un buen número de enigmas de todo tipo. Eso es una Escape Room, un novedoso concepto de ocio que acaba de llegar a Avilés de la mano de María Esteban y Rubén Carrio. «Viví tres años en Madrid y es allí donde lo descubrí», explica María, que se aficionó a estas aventuras en espacios reducidos y decidió crear la suya propia en su localidad de origen.

El enigma tiene mucho que ver con el antiguo Egipto. Solo hay que imaginarse que el célebre arqueólogo londinense Howard Carter, el mismísimo descubridor de la tumba de Tutankamón en el Valle de los Reyes pasó un tiempo en Avilés. Aquí vivió en una cabaña y aquí se dejó un libro en el que da muchas pistas para encontrar un magnífico tesoro oculto. Lo único que hay que hacer es entrar en esa cabaña e ir desentrañando cada uno de los mensajes.

«Es un reto intelectual en el que entran en juego la lógica y la habilidad», dice María. Advierte de que no solo hay que pensar, sino también buscar, revolver y asociar. Las pistas van llevando unas a otras. Las hay falsas y las hay auténticas, y todas ellas hay que descubrirlas en grupo: el mínimo es de dos personas y el máximo de seis. «Si reserva una pareja, esa hora ya queda cerrada», cuenta. En esta primera Escape Room avilesina no se comparten experiencias con desconocidos, sino que lo que se busca es que los participantes en el juego se sientan libres para expresarse, tomarse el pelo unos a otros o ponerse cabezonas, porque una de las cosas que ocurren es que «la gente se obceca mucho».

No quieren desvelar demasiados detalles de lo que el público va a a encontrase para no estropear el efecto sorpresa, pero garantizan una hora de diversión. «Estos juegos producen mucha adrenalina y, al final, la gente sale encantada», aseguran. Lo llevan comprobando desde que abrieron sus puertas el pasado día 28 de abril. Desde entonces han pasado por esta peculiar habitación, ubicada en la calle de La Estación, en las instalaciones de La Habana Vieja, un buen número de grupos llegados de distintos puntos de España. A tratar de descubrir los secretos de Howard Carter no solo ha llegado gente de Avilés, sino también de Cantabria o de Galicia. «Hemos tenido hasta despedidas de soltera», dice María.

Apertura y horarios

La noticia de la apertura de una Escape Room ha corrido como la pólvora en los foros de aficionados a estas experiencias, que cada vez son más numerosos, aunque también ha calado entre gentes deseosas de hacer cosas diferentes los fines de semana. El éxito ha sido tal que, aunque la idea original era abrir únicamente sábados y domingos, ya han tenido que ampliarlo a viernes y lunes, un día pensado para los trabajadores de la hostelería, ya que suele ser su jornada de descanso.

¿Qué hay que hacer para entrar la habitación de Howard Carter y sentirse como un auténtico explorador? Solo elegir un día y una hora y comprar las entradas, que se venden exclusivamente a través de Internet. Después, abrir la puerta que lleva a un mundo creado a base de muebles y objetos de anticuario y atrezzo de teatro, entre los que se cuenta una momia a tamaño natural.

«No da miedo», aseguran sus creadores, aunque también aseguran que «esto no es Walt Disney». Ellos se han pasado cerca de tres meses creando todos los enigmas «con mucha ilusión» y haciendo pruebas hasta comprobar era posible resolverlos en una hora. Si no, siempre se puede solicitar algo de ayuda externa, aunque lo verdaderamente emocionantes es «sentirse capaz de resolver las pistas».

Lo único que exigen es que los asistentes tengan más de catorce años si no va a haber adultos con ellos. «Los niños pueden descubrir algunas cosas solos, pero son enigmas para adultos», exponen. Al margen de eso, la Escape Room avilesina es un plan para todos los públicos, desde familias a grupos de amigos. «Lo único que buscamos es que la gente se lo pase bien», aseguran.

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