El Club de Piraguas de Villaviciosa regresa a El Calieru
El Ayuntamiento da por rehabilitadas las instalaciones tras siete años de conflictos legales con la empresa encargada de la obra
El Club de Piraguas Villaviciosa-El Gaitero podrá regresar al fin a las instalaciones de El Calieru tras tener que abandonarlas en ... 2018. Una espera que llegara a su fin «en las próximas semanas», destacó este lunes el alcalde de Villaviciosa, Alejandro Vega, durante la firma del acuerdo de cesión con el presidente de la entidad, Héctor Sampedro.
Siete años se ha tardado desde que cesara el uso de El Calieru por el colapso de gran parte de la cubierta del edificio, al que también se sumaba su grave deterioro, sin servicios básicos como luz y agua.
Originalmente, era propiedad de la empresa Sidra El Gaitero y el club lo usaba como su sede. En 2006, el Tribunal atribuyó a Demarcación de Costas la titularidad y esta, a su vez, la cedió al Ayuntamiento en 2017. Se concedieron 1.700 metros cuadrados de territorio marítimo-terrestre entre los que se encontraba el edificio, ubicado en la zona de El Calieru que le da nombre, junto a la ría, y la carretera AS-256. El objetivo era rehabilitar las instalaciones.
Tras la marcha del club por el derrumbe y la puesta en marcha del proyecto de obra –redactado en 2018 y adjudicado en 2019– comenzó un largo proceso de varios años con «numerosos problemas», explicó el regidor maliayo, debido a un conflicto entre la empresa adjudicataria y el Ayuntamiento. Este llegó a rechazar la recepción de las obras en 2021 por no ajustarse a lo estipulado en el proyecto y tuvo que resolverse en los tribunales.
Entre medias, debido a los retrasos, el club tuvo que trasladar totalmente su actividad a unas instalaciones que iban a ser provisionales, unos contenedores prefabricados en El Puntal donde se desarrolló la escuela de piragüismo.
Finalmente, el Consistorio dio por rehabilitadas las instalaciones y en el último Pleno se aprobó la renovación del uso del edificio, ahora con todos los servicios básicos correspondientes.
El acuerdo autoriza al club a volver a su antigua sede aunque se mantendrán de igual modo parte de las actividades en las instalaciones de El Puntal. La cesión es por un periodo inicial de un año, susceptible a prórroga, aunque tendrán que asumir los gastos de mantenimiento, limpieza, luz, agua y demás.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión