Los bomberos tuvieron que trabajar 19.000 horas extra el pasado año

El Servicio de Emergencias del Principado (SEPA) funciona a base de alargar la jornada a su plantilla más de lo contratado. El pasado curso registró más de 19.000 horas extra trabajadas en todas las categorías, lo que supuso un incremento de las nóminas que supera los 411.760 euros, según una respuesta que el departamento entregó a Rafa Palacios, diputado de Podemos.

«Sigue el despilfarro de dinero público. Año tras año, medio millón de euros en horas extra desde que se tienen datos, lo que supone millones de euros por una gestión nefasta», lamentó el diputado. La mayoría de esas horas extras «son de carácter estructural, el 80% son partes de refuerzo, es decir mala gestión de personal», aseguró.

A su juicio ese desembolso se aliviaría ejecutando las «modificaciones que vienen reclamando los sindicatos desde hace años. Prefieren seguir con el desfase organizativo antes de reconocer que otra gestión es posible».

La Sindicatura de Cuentas acaba de aprobar un informe al respecto. Puso la lupa en 2018, cotejando horas extras y volumen de incidencias y concluye que «tampoco existe una correlación entre ambas variables». De las 1.535 horas extras anotadas en aquel noviembre, 1.051 fueron «por irregularidad en el relevo», es decir, no se presenta el sustituto por retraso, baja o estar de descanso, lo que obliga a doblar turno.

Entre las recomendaciones que hace el auditor para mejorar la eficacia está «aprobar un plan para la ordenación de sus recursos humanos donde se incluya, entre otros aspectos, un análisis de las disponibilidades y necesidades de personal acorde a las necesidades del servicio».