Coronavirus en Asturias | Salud inicia un rastreo masivo entre los clientes de dos gimnasios de Gijón y uno de Avilés

Nuevo llamamiento de la Consejería de Salud para cortar el paso a nuevos contagios por coronavirus. El Principado emprendió ayer un rastreo masivo entre los clientes de dos gimnasios de Gijón, el Altafit de La Calzada y el Mcfit, y uno de Avilés, Quirinal 14 Sport. Aquellas personas que acudieron a cualquiera de estos tres establecimientos entre los días 17 de septiembre y 8 de octubre deberán cumplimentar el formulario publicado en Astursalud o bien llamar al 984.100.400. El Servicio de Salud del Principado (Sespa) contactará para valorar si proceden o no a realizar una prueba PCR.

Hasta que el Sespa no contacte, deberán limitar su vida social, vigilar su estado de salud y cumplir con rigor las medidas de protección. La búsqueda se centra en estos gimnasios al originarse en ellos cuatro de los 22 brotes activos. El gimnasio de Avilés tiene cerca de un centenar de socios y entre los contagiados se encuentran una profesora y ocho usuarios. El resto de trabajadores dio negativo.

En Gijón, en el gimnasio Altafit según pudo saber este periódico, se confirmó un contagio el 21 de septiembre y Salud se puso en contacto con ellos una semana más tarde. Tras realizar las pruebas a todos los monitores y a una «muestra significativa de usuarios» todos los resultados fueron negativos e indicaron que «Salud decretó que no había transmisión comunitaria». El comunicado de este jueves generó «malestar» e incomprensión por parte del gimnasio. Estas instalaciones se cree que pudieron ser el origen de contagios en la Comisaría gijonesa. Además, en el gimnasio Mcfit, «Salud ha confirmado que hay positivos indirectos derivados de ese gimnasio».

«Estamos preocupado», insistían tanto el consejero de Salud, Pablo Fernández, como el director general de Salud Pública, Rafael Cofiño, por el incremento de casos en esta segunda ola, con una incidencia «por encima de la que nos gustaría tener».

Cofiño apuntó que la mayoría de los brotes que se están produciendo en Asturias ahora mismo tienen como origen reuniones de carácter familiar o social y que estos «microbrotes» están, además, muy conexionados entre ellos. Lo que favorece la expansión del coronavirus. De ahí que incidiera en la conveniencia de reducir el número de contactos estrechos y aplazar actividades sociales innecesarias.

El coronavirus provocó este miércoles 118 nuevos contagios y catorce personas precisaron ingresar en el hospital, una de ellas en la UCI. 89 pacientes permanecen ingresados en planta hospitalaria y 23 en UCI.

Hasta la fecha 6.234 personas han contraído esta enfermedad desde febrero, de las que 900 son personal sanitario. En Ponga, en alerta naranja, el cribado realizado a la población permitió detectar un positivo entre las 520 muestras realizadas. En total son diez los casos activos, a los que se suman tres de residentes no empadronados. El grueso de positivos, hasta ocho, se registra en el pueblo de Sobrefoz, donde hoy se realizará un segundo cribado comunitario tras el realizado el martes 29. La alcaldesa, Marta Alonso, destacó que a la vista de los datos, «la situación está controlada».

Continúan las complicaciones en el ámbito educativo. En el oriente asturiano permanece aislada un aula de Infantil del colegio Reconquista de Cangas de Onís tras confirmarse el contagio de una profesora. Asimismo, la directora del colegio público de La Ería de Oviedo, Inmaculada Arigita, confirmó el contagio de dos niños. Y tras repetir las pruebas PCR a los alumnos y trabajadores de la escuela infantil Los Gigantinos de Cangas del Narcea, fuentes sanitarias indicaron que solo un educador dio positivo.

En la Universidad, el rector indicó que reforzarían las medidas si tuviesen «alguna sospecha de que existe un riesgo». «La situación está quizás mejor de lo que se podía prever. No hemos tenido ningún brote», sostuvo Santiago García Granda.

El centro de día Ría de Avilés cerró porque un usuario es contacto estrecho de un positivo. Cuentan con poder reabrir el martes si el usuario y una trabajadora que se sometió a las pruebas dan negativo. En caso contrario las pruebas se extenderían y se cerraría 10 días.