Los ladrones de pisos vuelven a actuar en Blimea a plena luz del día

Los asaltos a pisos habitados y a plena luz de día se han convertido en los últimos meses en la principal preocupación de los blimeínos. Aunque hasta el momento no se han producido incidentes ni daños personales, los vecinos temen que en algún momento pueda haber un altercado con los ladrones si alguna de sus víctimas las sorprende en plena acción.

Los asaltos son la comidilla en los bares, comercios, parques y demás sitios de reunión. Según transmiten las víctimas, los delincuentes actúan de día aprovechando que los propietarios se han ausentando de sus domicilios. Su botín se compone de joyas y el dinero en metálico que encuentran en las viviendas; la búsqueda de sus objetivos termina dejando las habitaciones muy revueltas.

El último robo se produjo el jueves de la semana pasada cuando un matrimonio que vive en la barriada de la zona cercana a la fuente del Bravial salió de su domicilio para hacer «un recado». Ellos mismos relataron que regresaron tras media hora «y ya nos encontramos la casa revuelta; nos faltaban las joyas y dinero que habíamos sacado a primera hora de la mañana de la Caja de Ahorros».

Avisadas las fuerzas de seguridad, se personaron en el domicilio para poder sacar huellas y localizar al autor o autores del robo, pero todo parece indicar que el mismo se perpetró con guantes, lo que complica la obtención de huellas claras que lleven a la identificación. En otros robos de esta misma localidad se produjo la misma dificultad.

Los vecinos reclaman una mayor presencia policial, para poder identificar a los autores de estos asaltos. «Tenemos miedo de que haya que cerrar con llave la puerta aunque salgas un minuto de casa», repetía ayer una de las vecinas de esta zona blimeína. La investigación apunta a que la entrada en los domicilios puede realizarse por el método del «resbalón», es decir abriendo la puerta con una tarjeta. En otros golpes accedieron al inmueble tras destrozar la cerradura.

Otros asaltos

Esta especie de robos exprés comenzó a preocupar a los blimeínos a finales de 2015, cuando se produjo el robo en varios establecimientos hosteleros. Además asaltaron dos viviendas en la zona de El Campu. Ambas el mismo día, en el mismo portal y situadas una frente a frente.

En abril de este año los robos en viviendas volvieron a alertar a los vecinos de esta localidad. En esta ocasión en una edificio de la zona de La Venta aparecieron al menos dos pisos con la cerradura forzada, pero sin que los cacos llegaran a entrar. Menos suerte corrió una vivienda de la zona de El Ronzón en el mismo edificio en el que ya se produjeron otros robos con anterioridad.

El primer hecho de estas características fue en abril de 2015 en la zona de El Campu, cuando entraron a plena luz en un edificio y desvalijaron un piso mientras su dueña se ausentó durante unas horas.

Aunque en la mayoría de los robos las cantidades sustraídas no son muy elevadas, los vecinos lamentan que «lo peor es que se llevan pequeñas joyas que para nosotros significan mucho y son recuerdos de familia».

Los cuerpos de seguridad recomiendan a los ciudadanos que denuncien este tipo de robos para poder investigar los hechos e intentar identificar a los autores de los mismos.