Dos heridos en una multitudinaria pelea entre jóvenes en el parque Dorado de Sama

«Eran unos niños, pero se golpeaban con extrema dureza». Así describe Severina García, vecina de Sama, la pelea que tuvo lugar el domingo entre un gran grupo de jóvenes en el parque Dorado del distrito langreano. Asegura que fueron varios minutos de patadas, puñetazos, insultos... La pelea multitudinaria se saldó con dos menores de edad heridos de diversa consideración, que fueron trasladados al Hospital Valle del Nalón.

Todo ocurrió en el entorno del quiosco de la música del parque, un lugar que tal y como adelantó este periódico, ya es frecuentado por los niños debido al aumento del vandalismo. «Nos tienen aburridos», lamentan los vecinos de la zona. El domingo, en torno a las ocho de la tarde, explican que había unos veinte jóvenes. Todo sucedió muy deprisa. «Caminábamos por delante de La Montera cuando vimos correr a un chico y a la altura de un coche azul, llegaron otros cuatro o cinco y empezaron a golpearse sin piedad. Al final sangraba mucho, tuvimos algo de miedo. Escuchamos las sirenas de la Policía, dimos media vuelta y nos fuimos porque más adelante había otro grupo de chicos zurrándose», relata Antonio Begega.

Según los testigos la llegada de una patrulla de la Nacional disolvió la pelea. Los agentes procedieron a identificar a gran parte de los participantes. Algunos apuntan que «se llevaron a algunos en los coches y llegaron varias ambulancias a por los que sangraban».

«Rebotaban contra los coches aparcados, de hecho rompieron varios espejos retrovisores. Creemos que los policías les dejaron notas para que fuesen a denunciar», comenta Severina García, que asegura que días antes ya se había producido alguna trifulca.

La Policía investiga ahora las causas que provocaron la pelea multitudinaria. Una de las preocupaciones de los vecinos y usuarios del parque es que «se trata de chicos muy jóvenes no deben llegar a los 18 años, es una pena». Temen que el parque se convierta en una zona para pelearse. Por ello insisten en la necesidad de reforzar la seguridad en Sama, sobre todo, en el parqueDorado. «Cuando hay algún suceso o cuando protestamos vienen unos días, pero después tardamos en ver a los policías por la zona», advierte Celestino Muñiz.

Es creciente el número de usuarios que han ido mostrando su «alarma» ante los abundantes actos vandálicos que se vienen produciendo en la zona y que hace meses, a mediados de 2019, llevaron al Ayuntamiento langreano a cerrar los baños públicos del parque, aludiendo a la «falta de civismo» de algunos usuarios.