«Los encontronazos en las habitaciones se dan a diario»

En el hospital del valle del Nalón la consternación ante el crimen en una de las habitaciones de la tercera planta mantiene abatido a todo el personal. Los compañeros del personal sanitario responsable de la tercera planta, bloque A, donde en la madrugada del miércoles uno de los pacientes mataba a su compañero de habitación, apostillan que «estamos destrozados, nunca piensas que puedes llegar a vivir algo así», y puntualizan que hicieron su trabajo «de forma impecable, pero es que una persona mate a otra porque le molesta su respiración no se puede comprender».

Todo el personal entiende que «necesitaremos unos días de descanso para gestionar todo lo que han vivido, prevenir algo así es imposible. Nunca hemos pensado que algo tan grave e inexplicable pudiese ocurrir en el centro».

Los sanitarios relatan que «en las habitaciones es habitual que haya roces entre los pacientes. A diario escuchamos quejas de todo tipo, desde que abren mucho la ventana, hasta que por qué la cierran. Que si la televisión está muy alta, que el compañero recibe muchas visitas y lo marean... Y todo lo que podáis imaginar, pero nunca una situación de estas imaginamos que terminaría en un suceso tan horrible».

Apuntan, además, que «tanto enfermeras como auxiliares y los propios celadores escuchan a los pacientes y tratan de dar soluciones. Vamos a las habitaciones las veces que haga falta siempre que no interrumpa trabajos de mayor importancia, haya días que nos vemos desbordadas y ahí seguimos atendiendo reclamaciones».

Reconocen que «en ocasiones hay roces que no se pueden gestionar e intentamos cambiar a alguno de los pacientes de habitación, pero en este caso apenas pasaron doce horas. ¿Cómo podían pensar alguien que iba a ocurrir una agresión? Ni mucho menos un crimen. Le damos mil vueltas y no encontramos explicación».

Algunos profesionales son conscientes de que «lo ideal con gente de edad avanzada que da problemas desde prácticamente su ingreso sería tener habitaciones individuales, pero la sanidad pública tiene problemas y necesidades más importantes».