«El Gobierno apostará por la industria española y asturiana»

Puntual, María Luisa Carcedo se bajó del coche oficial, a las seis de la tarde, frente a las puertas de la Feria Internacional de Muestras. Tras saludar cordialmente a quienes la esperaban, aguardó la llegada del presidente del Principado, Adrián Barbón, que se presentó tres minutos más tarde. La ministra en funciones de Sanidad, Consumo y Bienestar Social cambió pronto el ruido y los cánticos de las protestas en la calle por la música de gaitas, dentro del recinto ferial.

En el salón de actos del Palacio de Congresos, Carcedo escuchó con atención las intervenciones previas realizadas por la alcaldesa de Gijón, Ana González, y por el presidente de la Cámara de Comercio, Félix Baragaño. La ministra parecía tomar buena nota de sus palabras. Al menos a juzgar por lo que apuntaba en sus hojas, cuando se mencionaron las urgencias del plan de vías y de la llegada de la alta velocidad a la región, y también de la necesidad de impulsar con más empresas los terrenos de la ZALIA.

Después le tocó el turno de intervenir a la ministra del PSOE. De esta forma, Carcedo tomó el testigo de Carmen Montón, su predecesora como representante del Gobierno central en la inauguración del certamen, el año pasado.

Asturiana de nacimiento -Santa Bárbara, en San Martín del Rey Aurelio-, Carcedo destacó la importancia que la Feria de Muestras tiene en la «vida social, económica y política» del verano en la región.

Para ella, dos son los rasgos que se ven reflejados en primer término cuando se realiza una radiografía de Asturias: el carácter industrial y el patrimonio natural. Dos aspectos muy valorados por Carcedo, y a los que se refirió en varias ocasiones durante su intervención.

La industria y el medio ambiente son, a su juicio, las fortalezas del Principado, pero no se le escapa a la titular de la cartera de Bienestar Social que existe incertidumbre de cara al futuro cuando se habla de ambas cuestiones -«se enfrentan a grandes desafíos»-. En este aspecto, apeló a confiar en las nuevas tecnologías y los últimos avances para luchar contra el cambio climático, uno de los asuntos de «más importancia a los que ha de hacer frente la sociedad».

La ministra socialista reconoció que «no sabemos a dónde conducirá» esta situación, pero recordó que Asturias «nunca en su historia rehuyó los desafíos y no lo hará tampoco ahora, sobre todo cuando se trata de progreso». Un avance, remarcó, en el que «nadie se quede atrás en este territorio».

La transformación digital impulsada por el Gobierno fue puesto sobre la mesa por la ministra como uno de los puntos que ayudarán a afrontar esos retos, pero siempre con un sector industrial fundamental para crear puestos de trabajo. «El Gobierno quiere apostar definitivamente por la industria española y asturiana», matizó.

Según ella, Asturias siempre ha puesto a trabajar sus activos para salir «airosa» de los desafíos, a través, entre otras cosas, del esfuerzo de sus trabajadores por formarse y de «la responsabilidad de los agentes sociales y económicos por alcanzar acuerdos».

Para el Gobierno de España, según explicó, es «fundamental una industria más saludable» y se mostró convencida de que es así para el asturiano, pero también la recuperación de los derechos suprimidos a los ciudadanos en los últimos años, una vez que «la economía se ha consolidado», apuntó.

Finalmente, vinculado al tema del cambio climático, Carcedo aludió al desarrollo de políticas de diversificación en las comarcas mineras. Apeló a diseñar una transición «justa» y recordó que esta es «una oportunidad para el conjunto de España y la Asturias rural». Y reiteró la necesidad de fomentar las energías que tienen que ver con los recursos naturales, como la biomasa.

Después, cedió el turno a su amigo y compañero de partido Adrián Barbón, quien aprovechó la visita de la ministra para solicitar el fin del «bloqueo político» por el que atraviesa el Gobierno central.