Fomento considera inviable asumir todos los compromisos con Asturias en infraestructuras

La esperada visita de Ábalos a la región se prolongará durante dos días. Llegará hoy mismo y a las cinco y media de esta tarde se reunirá con el presidente del Principado, Javier Fernández, en la sede del Gobierno regional. Ahí expondrá lo que se ha encontrado en el ministerio con respecto a Asturias. Mañana por la mañana tiene previstas dos nuevas reuniones: la primera, a las nueve y media de la mañana, será con el alcalde de Oviedo, Wenceslao López, mientras que a las once de la mañana se desplazará a Gijón para reunirse con la alcaldesa, Carmen Moriyón.

Pero el planteamiento con el que llega el ministro a la región no augura muchas esperanzas de que los proyectos pendientes se agilicen. Y es que son muchos los frentes que tiene abiertos en Asturias.

El Ministerio de Fomento cifra una bajada de las inversiones en Asturias del 60% entre el periodo 2012-2017, cuando se alcanzaron los 213 millones de euros, con respecto al 2008-2011, que se llegó a los 567 millones. Además, apunta que, a pesar de esa merma, «el anterior Gobierno continuó prometiendo y anunciando numerosas inversiones». Pero asegura que, además, también bajó el grado de ejecución medio del presupuesto del Ministerio de Fomento para la región, pasando del 86% al 75%.

El equipo que dirige Ábalos se encontró con que, al cierre de 2017, el Ejecutivo popular había dejado de invertir en el corredor del norte el 45% del presupuesto que había previsto para ese ejercicio. Las causas son variadas, aunque desde Fomento estiman que las demoras de las actuaciones previstas a los hitos comprometidos han hecho que se vieran retrasados los pasos posteriores. A ello habría que añadir la propia duración de la redacción de los diferentes proyectos, las fases de los trámites administrativos que hay que cumplir antes de sacar a licitación los trabajos y la misma duración de los procesos constructivos. A ojos del ministerio, resulta inviable, en algunos casos, los compromisos que había adquirido con la región el anterior titular de la cartera de Fomento, Íñigo de la Serna.

El equipo de José Luis Ábalos critica los sucesivos cambios que ha detectado en cuanto al compromiso de la puesta en servicio de la variante de Pajares y, por lo tanto, de la línea de alta velocidad entre Madrid y Asturias. Se resalta que en 2016 se había llegado al compromiso de acelerar la variante todo lo posible con el objetivo de que el 31 de diciembre de 2017 entrara en funcionamiento con los dos túneles abiertos. Otro compromiso fue el planteado en 2017, cuando se pretendía tener los trenes circulando en pruebas en 2020. La última promesa fue de este mismo año, cuando se preveía que se tuvieran a punto las condiciones necesarias para que la circulación de los trenes en pruebas por el primero de los túneles de la variante fuera una realidad a finales de 2019.

En este asunto el ministro de Fomento planteará cumplimientos 'a medias' por parte del anterior Gobierno. El ministerio explica que se había establecido el primer trimestre de este año para la firma del correspondiente protocolo. Ese es el paso que sí se cumplió, pero no el segundo y que le debería haber seguido de una manera casi inmediata. Los planes para solucionar la integración ferroviaria en la Villa del Adelantado pasaban porque en la primavera de 2018 se licitara el estudio informativo. En la actualidad, según el ministerio, dicho estudio aún no ha salido a licitación.

Son varios los años que Langreo viene sufriendo las obras para llevar a cabo el soterramiento de las vías de ancho métrico, operadas por la antigua Feve. El equipo de De la Serna se había comprometido a finalizar la redacción del proyecto y licitar las obras de la superestructura y los diferentes sistemas durante el primer trimestre de 2018. Todo ello permitiría terminar la actuación, por fin, durante el primer trimestre de 2019. La realidad que se encontró el equipo de José Luis Ábalos, al parecer, no tenía nada que ver con lo programado, pues en junio de este año las obras todavía no se habían licitado. Según Fomento, actualmente están pendientes de la firma de un convenio que permita que el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) pueda licitar las actuaciones previstas con cargo a su propio presupuesto. Todo ello supondrá un nuevo retraso en la culminación de las obras.

Como resultado de los retrasos en los anteriores apartados, el Ministerio de Fomento dice que en contraposición con los compromisos y anuncios del Gobierno del PP, la inversión en materia ferroviaria en los últimos seis años (2012-2017) «disminuyó hasta casi un 40%. Y es que apunta que si en 2012 fue de 92 millones de euros, el año pasado solo alcanzó los 56 millones. Es más, Fomento abunda que la inversión ejecutada los dos últimos años supone que «el anterior Gobierno dejó de invertir más del 50% de la inversión prevista en ferrocarril». El equipo de José Luis Ábalos asegura que la tendencia se mantuvo durante los primeros cinco meses de este año y que, al cierre de mayo, la inversión en no alcanzaba el 22% de lo previsto para 2018. Fomento explica que los incumplimientos más significativos en materia ferroviaria «se encuentran en la conexión de Asturias dentro del corredor norte».

Es una vía de comunicación fundamental para salvar las vías en las inmediaciones de la estación de Oviedo y conectar la ciudad con el barrio del Naranco. Se pretendía emplear todo este año para licitar el proyecto que permitiera su ampliación a cinco carriles, su redacción y los trámites previsto a la licitación, con el objetivo de que en 2019 comenzaran las obras y finalizar los trabajos en 2020. El Ministerio de Fomento explica ahora que el pasado 3 de mayo se firmó el contrato de encargo para la adaptación en cuatro meses del proyecto existente de 2015. Pero antes de licitar las obras será necesario cerrar un convenio con el Ayuntamiento en el que se definirán las aportaciones de las partes y el alcance de la urbanización. Con todas estas novedades, las fechas comprometidas, según el ministerio, las fechas «parecen fuera de un horizonte realista».

Fomento pone como ejemplo esta actuación para reflejar «de forma latente la poca conexión entre lo anunciado y la realidad». Las obras comenzaron en junio de 2017 y entonces De la Serna aseguraba que se trabajaba para rebajar el plazo marcado de 39 meses y que fijaba la finalización de la obra en septiembre de 2020. El caso es que el ministerio asegura que solo se ha avanzado un 1,2% en la ejecución de la obra, con un modificado en tramitación por afecciones de servicios, tanto telefónicos como eléctricos, de gas, fibras ópticas, de abastecimiento y saneamiento.

Los números con los que trabaja el Ministerio de Fomento dicen que se pasó de invertir 158 millones en materia de carreteras en la región en 2012 a solo 53 el año pasado; una disminución del 66%. Desde Fomento indican que «nos encontramos ante numerosos compromisos en actuaciones de carreteras donde se prometían licitaciones de obras y proyectos que nunca se llegaron a cumplir. Pero es que también descendió un 19% la inversión en materia de conservación de carreteras.