La judicatura asturiana despide a uno de sus maestros

Fue un maestro para muchos. No solo en las aulas de la Facultad de Derecho de la Universidad de Oviedo, sino también en el día a día de su profesión. Por eso, la judicatura asturiana ha acompañado a la familia de Jesús Bernal Valls en su última despedida, en el funeral que se ha celebrado en la iglesia parroquial de Nuestra Señora del Carmen, en Oviedo. Su extensa familia, sus cinco hijos y nueve nietos, han estado acompañados por numerosos compañeros y amigos que compartieron la larga trayectoria laboral de quien llegó desde Salamanca a Asturias en 1962 y eligió la fiscalía como profesión y pasión.

Muchos han alabado estos días su labor. También el Presidente del Tribunal Superior de Justicia de Asturias, Jesús María Chamorro González, que habló en nombre de todos los jueces y magistrados que desempeñan su labor en el Principado y no solo en el suyo propio, al expresar su pesar por el fallecimiento de Bernal, que fue fiscal de sala del Tribunal Supremo, cargo en el que alcanzó la edad de jubilación. Chamorro destacó las «indudables virtudes de Bernal que, durante su larga vida, siempre mantuvo una inmejorable relación con los miembros de la judicatura asturiana de distintas generaciones, asistiendo cada año, hasta que su salud se lo permitió, al acto judicial solemne de apertura del Año Judicial». Destaca Chamorro que Bernal «siempre será recordado por su alta cualificación técnica y su profundo conocimiento del Derecho», virtudes que han sido reconocidas « unánimemente por todos los profesionales de justicia a lo largo de su fecunda vida».

Valls había llegado al Principado como interino, buscando una ciudad que le permitiera ejercer su profesión y dar clases en la universidad. En 1963 fue nombrado abogado fiscal de la Audiencia Territorial y «dedicó toda su vida laboral al compromiso con la Justicia y también a formar a los juristas asturianos con su gran labor docente en la Facultad de Derecho de la Universidad de Oviedo», recordó el presidente del TSJA.

Jesús Bernal nació en Salamanca en 1935. Hijo de un telegrafista, se decidió por estudiar Derecho. Aprobó varias oposiciones y se decantó por ser fiscal. Era además académico numerario, con la Medalla XXIII, de la Real Academia Asturiana de Jurisprudencia. Fue también durante algunos años profesor de Derecho Penal en la Universidad de Oviedo, docencia que ahora ejerce también uno de sus hijos, Jesús. Los otros dos varones, Gabriel y Ángel, también han heredado la pasión por el derecho.

A lo largo de su trayectoria, Bernal Valls publicó numerosos artículos individuales y participó en varias obras colectivas sobre diferentes aspectos del Derecho Penal y la actuación del ministerio fiscal entre otras muchas cuestiones. Su tesis doctoral, dirigida por Rodrigo F. Suárez Montes, versó sobre 'El delito de falso testimonio'.

Su compañero y amigo Leopoldo Tolivar recordaba estos días el respeto que siempre había despertado el jurista y la estela que había dejado. Su hijo, Jesús Bernal, destacaba su amor por la libertad y la rectitud, por la justicia en toda su amplitud. Y admitía el deseo de sus hijos de «llegar a ser como él».

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