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Una visita guiada ayer a los Jardines de Panrico, en Valdés. A. ARRUÑADA
Coronavirus en Asturias | El occidente, en guardia

Coronavirus en Asturias | El occidente, en guardia

Los tres nuevos casos en el área de Jarrio elevan la incertidumbre de los negocios. Los alcaldes piden «prudencia» y «buscar ocio saludable»

ANDREA ARRUÑADA

valdés / castropol.

Miércoles, 15 de julio 2020, 01:48

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«Había un exceso de tranquilidad, parecía que el virus no iba a llegar aquí». Así se pronunció ayer el alcalde de Valdés, Óscar Pérez, tras conocer que la Consejería de Salud había declarado un brote al confirmar, al menos, dos positivos relacionados con la mujer de 52 años residente en el concejo que fue diagnosticada el pasado viernes.

El regidor recuerda que se trata de un foco con origen «importado» de la República Dominicana. Eso, a su juicio, confirma que las medidas a nivel local «han sido las adecuadas». «Seguimos la evolución con preocupación», admite Pérez, pero llama a la «calma». «No ha habido masificaciones ni en playas, ni por fiestas, ya canceladas, ni en mercadillos», destaca. Una vez más, apela a la prudencia individual para poder conjugar «salud y economía».

Desde la Asociación de Comerciantes de Luarca, el presidente, Daniel Pérez, se muestra rotundo: «Sin turismo, Luarca se cae». Califica este verano como «el más estresante» por los protocolos a seguir y la «constante tensión. Cada día es un misterio; mañana (por hoy) no sabemos lo que va a pasar», explica este heladero de profesión. Precisamente, su sector vive casi por completo del verano. En la primera quincena de julio, recalca, «se está vendiendo más de lo normal», y eso se percibe en las calles de la Villa Blanca. El trasiego de visitantes es constante, pero parece que «cumplen» con el uso, ahora obligatorio, de la mascarilla.

Entre los contactos cercanos de la mujer dominicana afectada por la COVID-19, el fin de semana se encontraba en seguimiento un camarero de un conocido restaurante de la villa, lo que suscitó numerosos rumores. El representante de los comerciantes insiste en que «no puede haber un trato discriminatorio» ni un señalamiento hacia ningún negocio. Al contrario, solo queda «animarles», porque «sin nosotros, todo se iría al traste».

A escasos kilómetros del brote de A Mariña, cuya evolución empieza a arrojar un poco de luz, el alcalde de Castropol llama a extremar la higiene de manos y el distanciamiento social ante el caso detectado en el municipio. «Toda medida de precaución será útil», indica Francisco Vinjoy, a quien inquieta especialmente el cumplimiento de la normativa «adaptada» a cada tipología de trabajo.

Por ello, recomienda «buscar espacios de ocio saludables», que permitan sostener al tejido empresarial, a la par que no pongan en riesgo la salud de locales y foráneos. En similares términos se pronuncia Daniel Pérez. Cree que existe poca concienciación por parte de «jóvenes y no tan jóvenes» a la hora de disfrutar de la noche en la nueva normalidad. «A partir de cierta hora, parece que se olvida todo». Los datos epidemiológicos recuerdan que el virus sigue ahí fuera.

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