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«La gente gritaba mucho. No sabían qué había pasado»
Antonio Cuesta Miyares no dudó en parar su taxi, en el que iban ocho personas, al ver el autobús accidentado en la subida a los Lagos de Covadonga. Se ha desplegado un amplio dispositivo para atender a las 49 personas que viajaban en el vehículo
Antonio Cuesta Miyares, taxista de Taxitur, subía con ocho viajeros a los Lagos de Covadonga cuando se encontraron el accidente. No dudaron en parar e intentar ayudar. El taxista cuenta a EL COMERCIO que consiguió llegar al autobús, pese a la dificultad del camino. Recordamos que el accidente se produjo en una zona montañosa con vegetación espesa.
«La gente gritaba mucho. No sabían qué había pasado», cuenta Cuesta Mirayes. «No sé qué falló, pero el conductor es una gran persona», define el taxista.
El conductor del autobús es uno de los más experimentados en la ruta de subida a los Lagos de Covadonga. Según la compañía ALSA, cuenta con 21 años de trayectoria profesional. Añade la compañía que el autobús estaba equipado con cinturones de seguridad, cuenta con toda la documentación y revisiones en regla, con la última revisión superada este 3 de julio y la ITV el 8 de marzo.
Por causas que se investigan, el vehículo volcó esta mañana y dio dos vueltas de campana. Afortunadamente en el siniestro no se han producido fallecidos aunque sí múltiples heridos, dos de ellos graves. En el autobús viajaban 49 personas, contando al conductor, y 25 de ellas eran menores de edad. En el lugar se desplegó un amplio dispositivo para atender a los heridos y trasladarlos a distintos hospitales de Asturias.
