El incendio que arrasó el monte frente a Covadonga se inició para «regenerar pasto»

El incendio que a mediados de febrero arrasó el monte Priena, frente a Covadonga, fue intencionado y su fin era la regeneración de pastos. A esa conclusión ha llegado la Guardia Civil tras un mes de pesquisas, que se saldan con un vecino de Cangas de Onís investigado como supuesto autor de los hechos. Según apuntan desde el Instituto Armado, el Seprona de la Comandancia de Gijón, en colaboración con la Brigada de Investigación de Incendios Forestales del Principado de Asturias (BRIPA) del Oriente y la Guardería del Parque Nacional de Picos de Europa, «han podido determinar el origen intencionado» del fuego, que contó con «con varios puntos de inicio y cuya finalidad fue la regeneración de pastos».

El investigado, de 53 años, es propietario de una estabulación de ganado cercana y sus animales pastan «habitualmente en la zona afectada por el incendio», señalan desde la Guardia Civil. La búsqueda del presunto autor comenzó en la misma noche del incendio, el 15 de febrero. Fue un guarda del Parque Nacional quien dio aviso del fuego y quien vio desde un punto de vigilancia cercano a las antenas de Següencu cómo una persona prendía hasta cuatro focos en una de las laderas del monte de la Cruz de Priena. Sus movimientos se siguieron a través de la luz proyectada con su linterna y se comprobó también cómo abandonaba la zona en un vehículo, que no pudo ser identificado en un primer momento por la escasa visibilidad. Sin embargo, una vez en la zona, las patrullas de la Guardia Civil realizaron una batida que permitió encontrar el automóvil en las proximidades de su estabulación ganadera.

En ese momento el presunto autor no fue localizado, pero la información recabada por el Equipo de Investigación de Incendios del Seprona de la Comandancia de la Guardia Civil de Gijón pudo determinar finalmente tanto la intencionalidad del incendio como la identidad del vecino, a quien se le imputa ahora un delito contra la seguridad colectiva por incendio forestal. Desde la Guardia Civil indican que las diligencias ya han sido entregadas en la Fiscalía de Medio Ambiente.

En el incendio del monte Priena ardieron, según cifras del Instituto Armado, un total de 116 hectáreas de matorral y arbolado autóctono, 85 de ellas situadas en el interior del Parque Nacional. Para la extinción de las llamas fueron necesarias varias dotaciones de Bomberos de Asturias y dos cooperativas forestales. Recuerdan además que estuvieron en peligro varias viviendas de la zona baja del monte próximas a Covadonga, pues las llamas llegaron hasta el borde de la carretera que da acceso al Santuario. También en el Real Sitio vivieron una noche de terror ante el avance del fuego en una jornada de fuertes vientos.

El balance de incendios en lo que va de año deja 183 hectáreas de terreno afectadas y el motivo lo atribuyen a la «regeneración de pastos». La Comandancia de Gijón ha tomado en estos meses manifestación en calidad de investigados a siete personas por considerarse causantes de otros tantos fuegos en los concejos de Llanes (2), Piloña (3), Laviana (1) y Cangas de Onís (1). La Guardia Civil tiene en marcha un dispositivo especial de prevención e investigación entre el 15 de enero y el 30 de abril, fechas en las que detectan un mayor riesgo.