El PSOE de Asturias cierra la puerta a las subidas de impuestos que pide IU: «No es el momento»

La polémica surgió después de que el portavoz de IU-Convocatoria por Asturias, Xabel Vegas, adelantara la intención de presentar junto al PSOE una proposición no de ley para abordar una reforma fiscal y pidiera al equipo de Adrián Barbón que diera un paso más en la llamada vía fiscal asturiana. Vegas propuso incluir nuevos gravámenes dirigidos a las rentas altas, como el impuesto a los grandes tenedores o a las grandes superficies comerciales, para avanzar en un sistema fiscal más progresivo. Una propuesta que choca con el discurso que viene defendiendo la parte socialista del Gobierno del Principado, que entiende que las deducciones fiscales introducidas en los últimos años ya garantizan una mayor progresividad de la riqueza puesto que benefician a las clases medias y bajas.

No obstante, las declaraciones realizadas por IU generaron cierto revuelo, especialmente entre el sector empresarial, lo que obligó a Barbón a aclarar la postura del PSOE para acabar con cualquier duda. «No se trata de crear nuevos impuestos. No estamos en eso en estos momentos ni hay ningún acuerdo al respecto. Lo que hay es un diálogo franco, sereno y sincero entre los dos partidos que apoyan al Gobierno para tener una vía fiscal justa porque sabemos que la justicia fiscal es el camino de la justicia social», respondió Barbón, quien insistió en que su Gobierno apuesta por «profundizar» en la llamada vía fiscal asturiana.

Sus palabras sirvieron para aplacar las reacciones que las peticiones de IU habían generado entre el sector empresarial. No obstante, Fade advirtió de que «subir aún más los impuestos mermará la actividad económica» de la región, alertó que gravar aún más la vivienda «no sólo no conseguirá resolver el problema existente en la actualidad, sino que lo acrecentará», y anotó que las grandes superficies «ya soportan en Asturias una fiscalidad más elevada que en otros territorios».

La Cámara de Comercio de Oviedo, que también manifestó su rechazo a la propuesta de IU, mostró una actitud más sosegada tras recibir una llamada del consejero de Hacienda, Guillermo Peláez, «quien nos ha asegurado personalmente que no habrá una subida de impuestos y que las actuaciones del Gobierno se limitarán estrictamente a lo recogido en el programa electoral con el que el PSOE concurrió a las elecciones autonómicas».