El radar que más multa en Asturias vuelve a estar en Oviedo
Automovilistas Asociados Europeos revela el ranking de cinemómetros que más infracciones cazaron en 2024, con gran protagonismo para la autovía Ruta de la Plata y la del Cantábrico
¿Dónde están los radares que más multaron en Asturias en 2024? El colectivo Automovilistas Europeos Asociados (AEA) acaba de publicar el listado. En base a datos de la Dirección General de Tráfico (DGT) resulta que el título de cinemómetro que más infracciones 'cazó' el pasado curso se lo lleva el ubicado en la autovía Ruta de la Plata (A-66), en el punto kilométrico 35, al finalizar la subida a El Caleyo, vigilando a los vehículos en sentido hacia Oviedo. En total detectó 19.794 excesos de velocidad en un tramo que está limitado a 90 kilómetros por hora. En 2023 el aparato había tenido más actividad, con 26.104 infracciones denunciadas.
Con todo, su protagonismo sigue siendo evidente en la materia: uno de cada tres excesos de velocidad sancionados por la DGT en base a la red de radares fijos de Asturias partió de fotografías hechas por este aparato. Según las últimas estadísticas del Ministerio de Transportes, cada día circulan por la zona bajo vigilancia de este radar unos 2.500 vehículos.
El segundo punto donde más conductores fueron sorprendidos con demasiada velocidad está también en la A-66, pero dentro de la 'Y', concretamente en el la calzada de sentido hacia Gijón o Avilés, antes de la bifurcación del nudo de Serín. El radar ubicado ahí motivó 7.468 denuncias, unas 600 más que el ejercicio anterior. Quienes desde ese tramo siguieran su ruta en dirección hacia Avilés terminarían circulando ante el tercer cinemómetro más activo de 2024, que es el ubicado pasado el nudo de Serín, un aparato que reportó a la DGT 3.428 fotografías de excesos de velocidad, unas 900 más que en 2023.
El cuarto y quinto tramo con más excesos de velocidad denunciados se encuentran ya fuera de las autovías, en la variante de Avilés. Los dos radares situados en la N-632 en los puntos kilométricos 98 y 100 pasaron de las 6.000 denuncias en conjunto, unas mil menos que en 2023.
Tal y como reveló EL COMERCIO en su día, las estadísticas de radares y multas tienen una importancia relativa. El motivo es que el 47% de las cabinas de radar desplegadas junto a las carreteras están huecas, sin aparato instalado; la DGT busca así maximizar el efecto disuasorio que tiene en el conductor ver el cartel anunciador de que está siendo vigilado. La realidad es que luego va moviendo los aparatos de una manera sumamente aleatoria y entre territorios, para que resulte harto complicado prever dónde se estará multando efectivamente al día siguiente. Esta manera de operar altera del todo las estadísticas. Al final el volumen de sanciones cursadas viene determinado por el número de días que han estado efectivamente activos los radares ubicados en los tramos con mayor tráfico.
Dicho de otra manera y con dos ejemplos. Históricamente el cinemómetro de El Caleyo suele encabezar la clasificación, pero hay ejercicios en los que la DGT apenas lo tiene activo, cediendo ese puesto en la estadística a los aparatos ubicados en la 'Y' o en la entrada a Gijón desde ella. Según la estadística oficial, el pasado curso la red de radares fijos cursó un 23% menos de infracciones en Asturias respecto a 2023, lo cual no debe entenderse en el sentido de que los conductores asturianos respetan notablemente más los límites de velocidad tanto como que la disposición aleatoria de aparatos que organizó la DGT fue menos eficaz para detectar infracciones.
Con todo Mario Arnaldo, presidente de la AEA, insistió en que «la DGT debería replantearse su política de radares, ya que no se está consiguiendo el objetivo de evitar los excesos de velocidad, ni los accidentes, convirtiendo los radares en meros instrumentos de recaudación».