Desprendimiento en la AP-66

Los restaurantes de Pajares «no daban abasto» por la gran afluencia de clientes

«Una verdadera locura». Así describen los hosteleros ubicado en la zona leonesa del puerto de Pajares la jornada que vivieron este domingo tras el cierre de la autopista del Huerna. Lo que iba a ser una jornada de domingo habitual acabó convirtiéndose en un trajín. «No damos abasto» para atender a tanta gente a la vez, reconocían en restaurantes como Ezequiel. Así lo explicaba Arturo Gil, encargado de este negocio. «Esto ha sido una verdadera locura, un caos absoluto. Demasiada gente, pero también demasiado desorden porque mucha gente que había reservado mesa nos ha tenido que cancelar las reservas y nos hemos visto un poco superados», explicaba Arturo Gil, quien añadió no obstante que no cree que el cierre de la autopista les vaya a reducir la clientela. «Nosotros como estamos comunicados con Madrid por el AVE, no creemos que nos afecte mucho», dijo.

También, Sergio Prieto, del restaurante Golpejar, indicó que «ha sido un día de no parar». «Estamos a tope porque desde la mañana hemos tenido demasiada gente. Para nosotros no ha sido negativo lo del argayo, todo lo contrario», dijo este hostelero.

«Nos han dicho hoy que la autopista permanecerá cerrada quizás hasta diciembre, y ya nos estamos preparando para afrontar lo que viene», añadió.

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