Tráfico sanciona a más de mil asturianos al año con cuantías que los jueces cuestionan
Obvia unos márgenes de error que rebajarían las multas. Automovilistas Asociados estima en 3,9 los millones recaudados en exceso en la región
RAMÓN MUÑIZ
GIJÓN.
Jueves, 11 de abril 2019, 02:13
La Dirección General de Tráfico (DGT) aplica a las multas por radar parámetros que los jueces vienen considerando erróneos. Solo en el último año Automovilistas Europeos Asociados acumula «más de un centenar» de sentencias favorables contra este sistema. Así lo explica un colectivo que lleva desde 2010 pleiteando contra la cuestión. A pesar de las resoluciones, se mantiene intacto el mecanismo.
El objeto de la disputa reside en el margen de error. Los cinemómetros no son perfectos y cada uno de ellos tiene autorizado su uso siempre que se le aplique el margen de error determinado por el Centro Nacional de Metrología. «Los modelos más antiguos tenían una desviación mayor, los más modernos lo dejan en el 3%», explica Mario Arnaldo, presidente de Automovilistas Europeos Asociados.
EL COMERCIO analizó una base de datos con 56.405 multas cursadas por la DGT en Asturias entre los años 2013 y 2015, confirmando que Tráfico sí tiene configuradas las cámaras de tal forma que ese margen se respeta a la hora de distinguir entre los conductores que cometen una infracción y los que no. En los tramos limitados a 80 kilómetros por hora, los radares fijos concedían cierto margen y las multas solo se tramitaron a usuarios que iban por encima de los 88. En aquellos con límite a 90, las sanciones empezaron a partir de los 98. En las vías puestas a 100, nadie fue multado a menos que pasara de 109 y en las autovías con el límite genérico, esto es, 120, en realidad las sanciones se cursaron al pasar de 130.
El problema viene al decidir qué tipo de sanción corresponde a cada infractor. Hay varios escalones en función de la gravedad del exceso. Si el conductor se pasó por poco, la multa es de 100 euros sin detracción de puntos; en el tramo siguiente se le castiga con 300 euros y dos puntos y si aún se pasó más serán 400 euros y cuatro puntos. Cada franja tiene su límite delimitado y ahí la DGT lo aplica sin concesiones, obviando que los aparatos fallen. «Es incoherente, si reconoces que los radares pueden equivocarse unos kilómetros por hora y perdonas al que se pasa del límite por poco, lo lógico es que apliques también ese margen al calcular la multa», argumenta Mario Arnaldo.
Es lo que vienen reconociendo los titulares de 26 juzgados en todo el país, además de dos tribunales superiores de justicia. El Contencioso-Administrativo número 2 de Oviedo, por ejemplo, examinó el caso de un asturiano al que impusieron una multa de 300 euros y pérdida de dos puntos al considerar que iba a 74 kilómetros por hora en un tramo de 50. La magistrada-juez recordó que existe jurisprudencia sobre la cuestión, que «no cabe dudar» de la fiabilidad del radar fijo «en orden a ser utilizado para la imposición de sanciones pero, aún cuando se trate de aparatos de la máxima fiabilidad en cuanto tienen un mínimo margen de error, no cabe obviar que éste existe». En aquel supuesto al aplicar ese parámetro existía la posibilidad de que en realidad el infractor condujera a 69 kilómetros por hora, por lo que la multa que le correspondía era de 100 euros sin pérdida de puntos.
Ese afectado pleiteó, pero la mayoría opta por aprovechar la rebaja que da el pronto pago. En los tres años analizados este periódico localizó 3.206 multas puestas por radar fijo en Asturias sin atender a esos márgenes, a un ritmo de algo más de un millar por curso. En los tramos con límite a 80 kilómetros por hora, hay 1.711 conductores a los que se les aplicó el segundo escalón de multa, 300 euros y 2 puntos, por circular entre 111 y 116 kilómetros por hora. De haber sido aplicado el margen de error, les correspondía un castigo menor, de 100 euros. En los tramos limitados a 90 hubo 1.106 infractores a los que se cargó con multas de 300 euros, pese a que la velocidad a la que iban habría quedado dentro de las multas de 100 euros si se aplicaba el margen de error.
Automovilistas Asociados estima que en Asturias, desde 2010, la recaudación de más obtenida por la DGT estaría en los 3,9 millones si a los excesos con los radares fijos se suman los de los móviles.