La Universidad busca remedios para la alta tasa de abandono y la baja demanda de algunos títulos

Pero, sobre todo, se trata de conocer la situación de la oferta académica de la Universidad de Oviedo, su demanda, las tasas de ocupación, las tasas de abandono, los costes, el tiempo medio en acabar las titulaciones, la evolución de la matrícula, los estudiantes asturianos que tras superar aquí la EBAU realizan sus estudios universitarios en otras comunidades... Y así, localizar las fortalezas y las debilidades. Estas últimas pasan por tres cuestiones principales: la baja demanda de algunos títulos, las altas tasas de abandono y los grados redundantes. También por los problemas de la dispersión y lo caro que resulta mantener unas infraestructuras antiguas, además de «la subida dramática de los precios de la energía».

Para empezar, «la oferta actual de títulos oficiales y propios de la Universidad de Oviedo es relevante, diversa y completa pero, en el caso de las titulaciones oficiales de grado y máster, está algo descompensada, con una presencia superior de títulos de la rama de Ingeniería y Arquitectura en comparación con otras universidades». Además, «se constata que existen títulos con muy baja demanda elevadas tasas de abandono y que la oferta necesita una actualización». Eso es lo que lleva a proponer nuevos títulos, extinguir otros y modificar los planes de estudio de algunos más. Según el análisis, uno de los potenciales que existe es la implementación de dobles grados en la rama de Ciencias Sociales y Jurídicas y también en Ingeniería y Arquitectura.

En el último año, más de 4.700 estudiantes se presentaron a la EBAU y más de 4.400 la aprobaron, la cifra más alta hasta ahora. Para el primer año de las titulaciones, la Universidad de Oviedo ofrecía 5.177 plazas y ocupó 4.225. La tasa de ocupación es, por lo tanto, del 81,6%, aunque muy diferente entre el 100% de grados como Medicina, Fisioterapia, Enfermería y Matemáticas y el 20% de Ingeniería Informática. La cifra de estudiantes de nuevo ingreso es preocupante en algunos casos. Como lo es la demanda de los itinerarios bilingües, que muestran una «tendencia decreciente, especialmente significativa en los títulos de la Escuela Politécnica de Mieres» y en algunas Ingenierías de la EPI de Gijón. Los que no alcancen los 15 estudiantes nuevos el próximo curso, se suprimirán.

De entre los grados con menor matrícula de nuevo ingreso destaca Ingeniería Geomática, con una media de 14,2 alumnos nuevos en los últimos cinco cursos y 7 estudiantes nuevos este año.

Más de lo mismo en los másteres, con tasas de ocupación que en algún caso son de cero. Hasta 14 másteres de la Universidad registran menos de diez estudiantes de nuevo ingreso de media en cinco años. Pese a ello, el plan concluye que por el momento se mantengan para ver, entre otras cosas, cómo influye el el futuro la posibilidad que se abre de que en determinados casos se pueda comenzar el máster sin haber finalizado el grado. Las posibilidades para garantizar la viabilidad de algunos de estos títulos pasará también por «estudiar nuevas fórmulas de captación de estudiantes» y por convertirlos en bianuales.

Más problemas, las redundancias de grados. Existen varios títulos que «presentan similitudes sobre las que conviene reflexionar, de modo que no compitan entre sí por el alumnado y no multiplicar el gasto». Los grados afectados son Ingeniería Química e Ingeniería Química Industrial; Informática del Software e Informática en Tecnologías de la Información; Ingeniería de los Recursos Mineros y Energéticos e Ingeniería de Tecnologías Mineras; Maestro en Educación Infantil (Facultad de Formación del Profesorado) y el mismo grado en la Padre Ossó e idéntica situación para Educación Primaria.

Otra de las cifras analizadas es el porcentaje de alumnos asturianos que marchan a estudiar fuera. Se estima el 16% de quienes superan aquí la EBAU solicitan el traslado de expediente para comenzar estudios de grado en otra universidad. Existen muchas circunstancias diversas, destinos muy variados, quienes eligen títulos que aquí no se ofrecen o que no, que van a universidades públicas o privadas. En cualquier caso, destaca como destino la Universidad de León, que acoge a un centenar de nuestros estudiantes, seguida de la Universidad de Salamanca y de la UNED. Aumentan los traslados para estudiar dobles grados y el título que más salidas agrupa es Enfermería.

Pero, sin duda, uno de los grandes escollos para la Universidad son sus altas tasas de abandono, «muy elevados en comparación con los valores medios en cada una de las ramas de conocimiento a nivel nacional» y que alcanzan un 30,7% para los grados y un 5,6% en másteres. Se trata, dice el plan de un «fenómeno complejo», en el que incluyen muchos factores y se ha propuesto realizar un estudio específico con la participación de la Unidad Técnica de Calidad para la búsqueda de soluciones. La tasa de abandono más alta está en Ingeniería Eléctrica, con una media de 56,6% en los últimos cinco cursos.