Borrar
Las reinas de Efecto M abrieron el Descenso con su 'Yegua de Troya'. :: MARIETA

Un temporal de alegría e ingenio

'La Grecia de las Galaxias' triunfa en una edición del Descenso copada por la mitología

FERNANDO DEL BUSTO

Domingo, 7 de febrero 2016, 02:10

Cuando los ingredientes esenciales de una fiesta son el buen humor, el ingenio, un poco de talento, habilidades manuales y espuma, mucha espuma, poco importa que el agua nazca en una manguera o caiga del cielo. Si, además, estamos en Asturias se entenderá que todo el mundo con ganas de diversión se apuntó ayer por la tarde al Descenso de Galiana en una edición que, es justo reconocerlo, estuvo marcada por el ingenio de los veinte artilugios y las ganas de fiesta.

  • La Peña Anselmo.

  • La Peña Anselmo se convirtió ayer en la ganadora de la XXIX edición del Descenso de Galiana con 'La Grecia de las Galaxias', que fusiona elementos de la saga Star Wars con la mitología helena. El segundo premio fue para 'El Carontín de Galiana' de la Peña Ébano mientras el bronce recaía en 'La leyenda de Ícaro', de Los Juergapadres. El cuarto premio fue para 'El templu del Rayu' de El Puntazo, y en quinto lugar quedó La Peña Buenavista y 'La octava malahydra del mundo'. El sexto lugar del palmarés lo ocupa la peña Pillarno y su 'En parte sí, en parte...non'. El séptimo puesto lo alcanzó 'Venecia qué Grecia' de La Peña La Hermandad y cierra las distinciones la Peña Versalles con su 'Parte non Party'. En total, participaron 20 artilugios con 272 tripulantes. Por los ocho cañones instalados salieron 30.000 litros de espuma y 750 litros de espumógeno diluidos en 29.250 litros de agua. Se colocaron en Galiana, las plazas de Álvarez Acebal y de España y en las calles de La Cámara y San Francisco.

Sí, es cierto que se pasó frío, incluso mucho frío al inicio del Descenso, cuando arreciaba la lluvia y los dedos de la mano parecían congelarse, pero viendo como se movían todos los que quería bailar, como los más jóvenes retaban al tipo de la manguera para que los duchase, como en los lagos de espuma aparecían numerosas cabezas de todas las edades y con bastantes niños, todo eso, y más, demuestra que hubo un momento en que los antroxos se olvidaron del mal tiempo y se dedicaron a lo que habían salido: a disfrutar del Carnaval, del Descenso de Galiana.

Tal vez hoy domingo, y mañana lunes, el menú de antroxu deba incluir morcilla de ibuprofeno, tortilla de paracetamol y revuelto de acetilsalicílico, pero ayer sábado nada pensaba en comer. Seguramente hubo menos gente que si no hubiera llovido ni el vendaval hubiese azotado las calles de Avilés, pero los jóvenes con los, ya tradicionales, trajes de pescador disfrutaban de lo lindo tirándose por la acera en San Francisco. Las propiedades resbaladizas del pavimento, que algunos sustos provocan cuando llueve, convirtieron el lugar en una pista para deslizarse entre la espuma que arrollaba hacia la plaza de España.

El mal tiempo también facilitó que los espectadores aprovechasen las facilidades ofrecidas por las terrazas hosteleras a lo largo de Galiana. Todo un placer disfrutar de una rica y fría cerveza viendo bajar los artilugios y comentando el ingenio de las peñas.

El Santa Cecilia mantuvo la buena costumbre de años anteriores y abrió los balcones de la primera planta para que una banda de rock se sumase a la fiesta versioneando temas clásicos. Otra buena costumbre fue el aumento de las personas disfrazadas entre quienes veían el Descenso. Es una tendencia que se va consolidando y, cada año, son más los que se 'antroxan' y aportan sus pinceladas a una fiesta multicolor.

Todo ello no evita que el vendaval angustiase a los responsables de seguridad y a la propia concejala de Festejos, tan preocupada porque la fiesta salga bien como porque no se produzcan incidentes. La intención del Ayuntamiento era mantener el programa de la noche sin cambios y no suspender ninguna actuación salvo un empeoramiento del tiempo.

Como se ve, una fiesta por todo lo alto y que permite entender la cara de sorpresa que tenían los grupos de orientales que caminaban por Galiana o en la plaza de España fotografiaban a todo lo que se movía y fuese original.

Derroche de ingenio

Y no era poco porque los veinte artilugios se esforzaron al máximo para combinar diversión con el ingenio. Fueron varios los que sumaron música y se convirtieron en auténtica discoteca, como Belenos Partenón Party o el espectacular Carontín de Galiana de la Peña Ébano que surcaba Galiana a ritmo de AC&DC y con un gigantesco esqueleto moviéndose. Un espectáculo casi circense. No cabe duda que la labor del jurado fue especialmente complicada en la tarde noche de ayer.

Un Antroxu con la Grecia Clásica ofrece numerosas ideas para crear artilugios. Pero hubo peñas que buscaron su inspiración en otras fuentes como Los Sportingueros, que pasearon a 'El ariete de los sportingos' por las calles de Avilés. Era lo que decía el nombre: un ariete de derribar puertas de castillos pero con los colores del equipo gijonés.

La Hermandad creó una góndola, ('Venecia que Grecia') y La Pecera montó una catapulta con la que cerró el desfile de artilugios.

Mucha Grecia

Fueron las únicas excepciones en un recorrido abierto por las reinas de este año, la Peña Efecto M, y su 'Yegua de Troya' que recordaba a más de uno el espectacular caballo de Troya que había recorrido el Descenso en sus primeras ediciones. El resto se inspiró en la mitología griega, aunque hubo fusiones como 'La Grecia de las Galaxias' de la Peña Abuelo Anselmo donde no faltaban robots también míticos como R2D2 y BB8 y que se llevó el primer premio. Mítica también era la cabeza de Medusa que se pudo ver, o Poseidón con su corte ('La fuerza de Poseidón' de Las Culebrillas) o 'El Grifón' de Los Arronxaos que movía sus alas. No era el único efecto de los artilugios. 'La octava Malahydra del mundo', de la Peña Buenavista, contaba con una cabeza de la que manaba un líquido mágico por las alegrías que despertaba. Algunos decían que era calimocho, pero vete tú a saber. 'Griegos al agua' (de Vehinsa) disponía de sus propias mangueras para aportar más agua a la fiesta, como si no fuera suficiente la del cielo y la espuma del Descenso.

Los Juergapadres hicieron cantera con su 'Leyenda de Ícaro' que juntaban familias en la fiesta. Los niños disfrutaban del Descenso sabiendo que más pronto que tarde serán ellos los que brinquen entre la espuma y en el futuro terminen diseñando su propio artilugio para vivir la fiesta como cuando eran niños. Desde Pillarno, se aportó un juego de palabras 'En parte sí, en parte non' con mucho talento en su ejecución como se apreciaba en los veinte artilugios que surcaron Galiana en un Descenso donde el ingenio y la diversión derrotaron al temporal.

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

elcomercio Un temporal de alegría e ingenio

Un temporal de alegría e ingenio