Puerto pesquero y polémica estéril
José María Urbano
Sábado, 13 de febrero 2016, 18:31
No hay nadie en esta ciudad que albergue alguna duda sobre la vital importancia del puerto pesquero para Avilés. Así ha sido desde la Baja Edad Media y lo sigue siendo hoy como el puerto más importante de Asturias y uno de los destacados del Cantábrico.
Por eso sorprende la polémica sin sentido que ha iniciado alguien en nombre de la Cofradía de Pescadores y que el jueves alentó el PP con unas declaraciones de su diputado Luis Venta, arropado por el portavoz del grupo municipal popular, Carlos Rodríguez de la Torre, que no se sostienen. Pura frivolidad política para ganarse unos titulares gratis.
Nueva Rula de Avilés S. A. acaba de pagar 1,1 millones de euros tras firmar un acta de conformidad con la inspección realizada por la Agencia Tributaria en el sector, en donde, de arriba a abajo, desveló algo que históricamente se sabía y se aceptaba: la proliferación de operaciones no declaradas en las transacciones de todo el negocio pesquero. Fue un acta de conformidad recomendada por técnicos externos de la sociedad, en evitación de males mayores, que podrían haber tenido reflejo en el ámbito penal. Por cierto, una conformidad firmada también por la práctica totalidad de los actores del puerto pesquero. Al final, capítulo cerrado e inicio de una nueva etapa en donde ya no caben más engaños por parte de nadie. Como se suele decir, a partir de ese momento, todo el mundo por el libro.
Desde la Cofradía de Pescadores se inició entonces una campaña exclusivamente a través de los medios de comunicación para anunciar su disposición a hacerse cargo de Nueva Rula de Avilés y erigirse en única gestora. Pese a pertenecer a su consejo de administración, como tenedora del 33 por ciento de sus acciones, en ningún momento ha llevado esa intención al consejo al que no asiste desde hace meses, ni por supuesto ha presentado dos elementos básicos de su pretensión: cuánto está dispuesta a pagar por el cien por cien de las acciones; y, dos, de qué capital dispone para ponerse al frente de una sociedad que conlleva el pago a una plantilla de trabajadores más todos los gastos corrientes de actividad y las obligaciones que tuviera contraídas la actual sociedad. Mientras todo eso no se traslade al consejo de administración y en cambio se siga utilizando la prensa como vehículo de propaganda y de declaración de intenciones, esa propuesta no puede ser tenida en cuenta. Carece de seriedad.
Por eso, las declaraciones del diputado del PP y de su colega en el Ayuntamiento son un puro dislate. No aportan un solo dato (es falsa la «huida de barcos», como lo es la «difícil situación económica», como lo es asimismo la «politización» de la sociedad, que es gestionada exclusivamente por un gerente) y se quedan en el insulto chusco. Flaco favor le hacen unos y otros al puerto pesquero de Avilés cuando más se necesita remar todo el mundo en la misma dirección.